PRIMER LIBRO DE LA BILOGÍA "EN LA MENTE DE ALENA."
Yo, Alena Calwell, no espero muchas cosas, aunque tengo mis metas, mis sueños... Siempre ando usando la mente. Soy escritora. Mi burbuja es mi zona de confort, y el inminente primer año de Universid...
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Cuestionario: Preguntas que me auto-pregunto y ahora tengo tiempo de responder.
1- Describe tu vida en una palabra.
Aburrida, muy normal, aunque lo normal no exista. Pero no encuentro otra palabra. Mis padres nunca están, mi hermano es la personificación del excremento y... Solo pido una palabra, no un pergamino.
2- Descríbete en tres palabras.
Bien, acá vamos a un asunto más personal. Qué sé yo. Tal vez... Inteligente, alegre y... prepotente, pero solo con el excremento.
3- ¿Cuál es tu mayor sueño?
Diría que mi mayor sueño es graduarme en tiempo y forma en la universidad, aunque estaría mintiendo, y no es que ese no sea mi sueño, pero mi súper sueño es publicar mi libro, que se venda en diferentes idiomas y tenga que hacer firmas y... Me dejo llevar demasiado y mi imaginación vuela cuando se trata de mis libros... Ah, y también quiero saber la coreografía de "Single Ladies", pero soy peor bailando que un palo.
4- Describe cómo es tu vida amorosa.
Mi hermosa vida amorosa... ¿Quién la conoce a esa muchacha? Porque yo no. Primero: ¿amorosa? Ni siquiera mi hermano es amoroso conmigo, y menos mis padres. Segundo: ¿de dónde saco a un chico? En mi mundo no existen. Y tercero: disfruto más de mi soltería de lo que me gustaría, porque no quiero tener novio, pero tampoco quiero vivir con ochenta gatos. Nada de límites, chica.
5- ¿Cómo le pondrás a tu perro que, tal vez, llega mañana?
Esta es la más sencilla y me gusta presumir el nombre que he elegido para el cachorro que he adoptado, y ese es (redoble de tambores), Morcilla.
6- ¿Cómo te sientes con respecto de que vas a iniciar una nueva etapa en tu vida, o sea, la universidad?
Seré totalmente sincera, y es que me siento aterrada, paranoica, loca, chiflada, con picazón, con pesadillas, con miles de cosas revoloteando adentro de mi frágil cuerpo. Ansiosa, tanto que no tengo uñas. Y también me siento enojada. Y la última no es por la universidad, tiene que ver, pero no es la protagonista. Es entonces cuando volvemos de nuevo al excremento, y es que ese señorito que tiene casi veinte años, pero parece de ocho, va a tener que hacerse cargo de mí ya que todavía no tengo licencia para conducir, y subirme a un auto con él es lo mismo que subirme a una montaña rusa y no tener protección... Es un animal el estúpido, siempre me asusta y hace cosas para que a mí me den menos y menos ganas de aprender a manejar.
7- ¿Por qué mis padres nunca están?
Prácticamente les importamos un carajo, o sea, ellos dicen: "debemos trabajar, debemos trabajar..., gua, gua, gua". Pero noto esa falta de paternidad que poseen los dos. Cuando los ves, te dan ganas de echar a correr y preferir hablar con alguien más. Yo no puedo decir de qué he hablado con mis padres en los últimos meses, y no lo recuerdo, más bien porque o me ignoraban, o cuando hablaban, hacían que me quedara dormida a los dos minutos. Aunque la mayoría de las veces quieres huir de ellos y encerrarte para que no puedan ni siquiera mirarte.
