Cap 28

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- ¡Oliver ven! ¡Corre! - Escuché un grito en el salón. 

Dejé caer los platos que estaba lavando en el fregadero, no sé cómo no se rompieron, y corrí hacia la procedencia del grito, asustado. 

- Dame tu mano - Dijo, yo le hice caso y, pese a estar aún mojada, se la di.

Melody se la acercó a la barriga y pude notar perfectamente un pequeño movimiento debajo de mi palma. No pude evitar sentir un gran ola de ternura cuando noté a mi pequeño sobrinito, Ethan, que estaba sentado al lado de Mel me miró con una gran sonrisa. 

A Mel solo le quedaban un par de meses para dar a luz, ya tenía una barriga tan grande que apenas podía moverse mucho, por eso iba casi todas las tardes a ayudarlos con las tareas del hogar. Ethan había estado haciendo turnos dobles para ahorrar dinero para el pequeño y por supuesto para la boda que, aunque la había querido dejar para más adelante,  ya tenían más que planeada.

- Parece que hoy el pequeño está más activo que de costumbre, capaz te sale futbolista - Dije, ambos rieron.

- Sea lo que sea va a nacer con piernas fuertes, te lo aseguran mis pobres costillas.

Al ver que todo estaba bien volví de nuevo a la cocina para terminar de lavar los platos que me quedaban. Ethan besó la frente de Mel y me andó detrás de mí.

- Oye Oli - Dijo bajando el tono de voz - Estos días te he visto algo pensativo, ¿te ocurre algo?

Realmente me sorprendió que se hubiera dado cuenta, no pensaba que estuviera siendo tan obvio. Yo lo miré por unos segundos y aparté la mirada para seguir concentrado en mi tarea.

- Sabes que hasta que no me lo digas no me voy a ir, y realmente estoy muy cansado después del turno doble, osea que tú me dirás.

Chasqueé la lengua por aquel pequeño chantaje emocional, era especialista en eso. Yo le dediqué otra pequeña mirada y se me escapó una pequeña sonrisa.

- ¿Por qué sonríes? - Preguntó de nuevo.

- Hoy estás preguntón, ¿eh? - Reí por lo bajo - Le quiero pedir matrimonio a Ryan.

Él abrió lo ojos y la boca con amplitud, muy sorprendido.

- Oye, ¿qué hay de esa reacción? Parece que hubieras escuchado que los cerdos vuelan.

Carraspeó la garganta y estiró la espalda, recobrando su compostura.

- Es que realmente pensé que te lo pediría Ryan a ti, no tú a él.

- ¿Y se puede saber qué hay de malo en que le pida matrimonio? - Arrugué el ceño

Euthan levantó las manos al aire con un gesto de inocencia y negó con la cabeza.

- No es eso, solo que como eres mmm... la "mujer" de la relación pues pensé que te lo pediría él, no te enfades - Rió con nerviosismo.

- ¿Acaso tengo cara de mujer? - Le grité - Anda y vete a la mierda, sabía que no debía decirte nada.

Cogí el trapo de encima de la encimera y me sequé las manos para luego tirarlo contra el suelo.

- Oliver lo siento, yo no... - Empezó a decir.

- Cállate, Olivia no tiene nada más que hablar contigo - Dije con odio - Termina tú de fregar tus platos.

Tras decir eso cogí mi mochila y salí de su apartamento dando un fuerte portazo. 

Siempre he odiado la gente que dice eso, en nuestra relación no hay ninguna mujer, no es muy difícil verlo. Y aunque así fuera, ¿qué problema hay en que le pida a Ryan matrimonio? ¿Qué tengo que esperar a que me lo pida él? Pues no me da la gana joder.

Anduve por la calle dando fuertes pisotones contra el suelo tratando de descargar la rabia que sentía. Que me lo dijera alguien me hubiera dado igual pero que fuera Ethan me dolió, ya se podía haber callado la boca.

Pese a haber intentado calmarme llegué a casa aún cabreado. Ryan, que estaba viendo una película, al verme apagó la televisióny se acercó a mí.

- Hey niño, ¿qué te pasa? - Puso sus manos en mis hombros con expresión preocupada.

Yo me aparté.

- ¿Por qué coño me dices niño? Ni que tuviera 5 años.

Él al ver que no estaba de buen humor volvió de nuevo a sentarse en el sofá.

- Cuando quieras hablar me avisas - Dijo tranquilo - No voy a dejar que pagues tu enfado conmigo, sé que no quieres.

- Que asco me da que seas tan genial idiota - Refunfuñé.

- Yo también te quiero - Dijo desde el salón mientras yo me metía en el baño, necesitaba una ducha fría.

Al salir, ya más calmado, me senté a su lado sin mirarle. Él me miró, apagó de nuevo la televisión y me dio un beso en la mejilla.

- Cuéntame, ¿qué paso?

- ¿Soy la mujer de la relación? - Pregunté directamente.

Ryan al principio se me quedó mirando, asimilando la pregunta, y de la nada comenzó a reírse a carcaja limpia.

- Oliver ¿qué estás diciendo? Aquí no hay ningún rol de nada, tú eres mi novio y yo el tuyo, ¿alguien te lo dijo? - Dijo secándose las lagrimillas.

Yo arrugué el ceño y miré hacia otro lado, sintiéndome un poco ridículo.

- Ethan - Susurré.

- Venga no lo habrá dicho con mala intención y lo sabes, no te pongas así - Le dediqué una mirada con odio - Pero sí que te debe una disculpa, ya lo hará - Me acarició la cabeza.

Asentí con la cabeza y me recosté en su regazo, aún seguía molesto pero no tanto, Ryan siempre sabía qué decirme para calmarme.

- Ryan - Le llamé tras unos segundos de silencio.

- ¿Qué ocurre? - Respondió acariciandome la cabeza con la yema de sus dedos.

- Quiero que vayamos de viaje.

- ¿A dónde quieres ir? - Preguntó con una cálida sonrisa.

Yo pensé por un momento.

- Me da igual, mientras que esté contigo estará todo bien.

Él me dio un pequeño beso en los labios y asintió. Aprovecharía ese viaje para demostrarle a Ethan que sí le podía pedir matrimonio a Ryan, sería la mejor pedida de mano de la historia, solo espera y verás.

Ryan 2 (+18 - Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora