Red || Pansy Parkinson

29.

Los exámenes habían llegado, la mayoría de los estudiantes estaban estresados, repasando o aprendiendo los contenidos de las materias, a excepción de Elizabeth, había estudiado con un buen tiempo de antelación, y ahora solo miraba a Pansy mientras leía desesperadamente un libro de Encantamientos.

—Wingardium leviosa es para hacer que las cosas bailen—asintió, entonces negó con la cabeza de inmediato—. No, es para cambiar de color las cosas—entonces miró a Elizabeth—. ¿Sí?

— ¿Por qué no miras el libro?—preguntó la rubia, recostada en la cama de Pansy, mientras ella estaba sentada frente a un escritorio con el libro en las manos.

—Sería trampa—dijo con obviedad—. Estoy tratando de responder todo lo que me sé sin mirar el libro.

— ¿Y no sería trampa si te lo digo?

Pansy negó con la cabeza de inmediato.

—Obvio que no, Lizzy—dijo—. No es trampa, ahora, por favor, dímelo.

—Wingardium leviosa es el encantamiento levitatorio, querida Pansy—le respondió, mirando la mirada de decepción que cruzó por su rostro—. Aún tienes tiempo, no te desanimes, puedo ayudarte a estudiar. —ofreció, levantándose de la cama.

—No, no—negó la ojiverde—. Debí hacerte caso—suspiró—. Tú ya estudiaste, no voy a hacer que vuelvas a estudiar solo para ayudarme.

Elizabeth caminó hacia ella y le quitó el libro de sus manos.

—Deja que te ayude—insistió—. No quiero que repruebes nada, así que te voy a ayudar.

—Bien—Pansy suspiró—. ¿Tienes alguna idea para motivarme?—preguntó mientras mostraba su sonrisa ladeada y alzaba las cejas.

—Muchas—Pansy sonrió ampliamente por la respuesta—. Puedo darte golpes en la cabeza cada vez que respondas algo mal.

—No—se quejó—. No me refería a eso.

— ¿Ah, no?—preguntó Elizabeth, fingiendo mirar el libro y no saber a qué se refería Pansy—. ¿A qué te referías entonces?

—A que me dieras muchos besos, Lizzy.

Elizabeth rio y bajó el libro para mirar a Pansy, sus ojos verdes estaban clavados en su rostro, esperando una respuesta.

—Estudia, entonces, veremos.

Pansy se tomó eso como un «sí» y asintió rápidamente, queriendo comenzar lo más rápido posible para terminar pronto.

★★★

Después de largas tardes de estudio sin besos de Elizabeth (la rubia había dicho que solo la distraería) Pansy había hecho todos sus exámenes y, para su sorpresa, se encontró pensando que podría sacar una buena nota.

Elizabeth también había rendido sus exámenes, sintiéndose segura sobre sus respuestas y segura de que tendría las notas suficientes y más para su pasantía en San Mungo.

— ¿Qué haremos para celebrar que terminaron los exámenes?—preguntó Draco. Elizabeth y Pansy estaban en la sala común de Slytherin, abrazadas en un sofá; Henry estaba al lado de Draco; y Daphne y Rachelle se habían sentado cada una en un sofá individual.

—No sé, ¿beber hasta caer muertos?—sugirió Rachelle.

— ¿Tener una noche de paz para dormir?—sugirió Daphne, con aspecto cansado—. Desde la locura de los exámenes no he dormido ni cinco horas seguidas.

—El alcohol es el combustible que te impulsará a lograr tus sueños. —dijo Rachelle con una sonrisa.

—Sí, si mi sueño es caminar desviado y sentir que el suelo se me mueve. —dijo Daphne sarcásticamente.