Capítulo 21. Entrando en aguas peligrosas

226 41 4
                                    

Los contratiempos en un viaje no son nada inesperado. Pero, su Alteza no imaginó que, al viajar con los jóvenes soldados, estos contratiempos fueran algo intensional.

El sol golpeaba sin miramientos a los viajeros incrementando su fatiga. Xiao XingChen estaba preocupado por los jóvenes soldados que montaban a caballo totalmente indefensos del clima. Detuvo el carruaje y sugirió descansar. El grupo encontró un lugar fresco a la sombra de un roble.

Wei Wuxian rebusco en su bolso un contenedor de madera que Jiang Yanli le había dado antes. Cuando lo encontró y se aseguró de que su contenido estaba bien, una gran sonrisa se formó en su rostro, pero las palabras de Lan Wangji hundieron esa felicidad.

Debemos continuar, no puedes beber licor soltó con determinación.

Wei Wuxian en respuesta sostuvo recelosamente las botellas con el liquido brillante y cristalino, podía sentir su frescor gracias a que estaban perfectamente conservadas. Replicó Hoy hace tanto calor, el clima es perfecto para beber licor. Tomar un poco, no puede ser dañino.

Wei Wuxian, deberías escucharlo. Todavía no hemos encontrado la montaña— dijo Jiang Cheng, acomodando las riendas de su caballo.

¡Alteza!— chilló buscando consuelo en una figura de autoridad. Pero la figura de autoridad ya tenia un pie en el carruaje, dispuesto a olvidar el asunto. XingChen le regaló una sonrisa para animarlo y se subió.

Así, el podre corderito abandonado por sus amigos, tuvo que enfrentarse a una estatua de jade helado. Ágilmente, fue desbalijado y su preciado licor fue confiscado. En su corazón guardo con rencor la imagen de esos ojos dorados.

Más adelante, el camino los llevó hasta un inmenso campo de arroz donde mujeres de varias edades recogían los granos bajo el sol abrazador. Las mujeres mayores ignoraban olímpicamente a los viajeros enfocadas en su ardua labor. Pero los atractivos soldados no pasaron desapercibidos entre las sonrojadas muchachas que ocultaban sus rostros bajo sombreros de paja.

Los soldados del reino eran muy reconocidos en el pueblo, por ser sus defensores y brindarles seguridad. Aunque tenían fama de tener mal carácter, existía el rumor de que los hombres al servicio de la guardia real eran verdaderas bellezas, extendiendo su popularidad entre las jóvenes solteras. Las muchachas aprobaron esos rumores.

Wei Wuxian confiaba mucho en su aspecto, era apuesto y lo sabía. Se dirigió a ellas con una sonrisa coqueta Señoritas, debe ser agotador trabajar bajo el sol. Las mujeres no deberían esforzarse de esa forma. Ante mis ojos parecen tiernos retoños de loto.

Jiang Cheng puso los ojos en blanco, Wei Wuxian presumía de ser un considerado caballero cuando no lo era. Y Lan Wangji notó que Wei Wuxian frente a las mujeres era otra persona.

Las muchachas sorprendidas chillaron en coro, las más valientes se animaron a responder acompañando sus palabras con leves risitas Joven Maestro, tiene razón. Es muy perspicaz, eso lo hace aún más apuesto.

Nada de eso. ¿Cómo podría presumir de belleza?, teniendo a mi lado a estos llamativos caballeros. Señoritas, ¿No les parece que ellos son todavía mejores que yo? ¿Qué opinan del soldado con el ceño fruncido?— señaló primero a Jiang Cheng, totalmente desinteresado en esa clase de atención.

No está mal. El Joven Maestro, es mucho más encantador, pero él también es muy apuesto— las jóvenes ganaron confianza, ya no sonreían con timidez.

Eso es cierto. Aunque desafortunadamente nuestro amigo ya está ocupado— al instante se escucharon suspiros y chillidos de desilusión Tranquilas, aún queda otro Joven Maestro. ¿Qué opinan de él? ¿Creen que es mejor que yo?— señaló maliciosamente a Lan Wangji.

|Enamorado del enemigo| - Xue Yang y Xiao XingChenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora