Amber se despertó frotándose los ojos. Fue en busca de algo que llevarse a la boca, estaba hambrienta. Recordó la cena de la noche anterior y se alegró de que todo fuera bien, a Jake le había caído estupendo su cuñado y su hermana, y viceversa. Am se sentía feliz.
Cogió un tazón de uno de los estantes de la cocina y lo llenó de leche. Lo puso en el microondas un minuto.
-Auch, quema. – lo dejó en el mármol, al sacarlo del electrodoméstico. Le vertió un poco
de leche fría para compensar y luego le echó unos cereales de chocolate que tenía Jack en uno de los muebles.Se llevó la primera cucharada a la boca mientras pensaba en lo que haría hoy.
-Mierda, la fiesta de Cal. – suspiró, aun eran las diez y cuarto de la mañana. – Bah, que más da. Me vestiré normal, total es una simple fiesta con música y amigos, en una mansión de un pringado, que probablemente quedará destrozada.- Ells rió. Hablaba consigo misma en voz alta, pero Jake la había escuchado. Cuando se adentró a la cocina.
-Buenos días, reina. – le dio un beso en la frente.
-Buenos días, rey. – lo intentó imitar y rio por lo mal que le quedaba ese apodo. Jake sonrió.
-¿Y bien? ¿Qué dices que vas a hacer hoy? – dijo Jake preparando café.
-ir a una fiesta de un amigo junto con April.
-ok... deja que me lo piense. – dijo Jake con una expresión de interrogación.
-¿pensar qué? ¿Ahora resulta que eres mi papá? – sonrió. – no necesito tu permiso para irme de fiesta– le apuntó con la cuchara, entrecerrando los ojos.
Jake arqueó una ceja – Bueno vale, si me lo pides así, si te dejaré ir... - dijo irónico pero divertido- pero nada de fumar, beber ni drogas. Ah, y ni falta que te diga que nada de mirar a otros.
Amber soltó una sonora carcajada.
-Te lo digo en serio.
-Adoro tus celos. – rió Amber– Vale, papi. La segunda parte de la lista, te aseguro que la cumpliré. – se levantó y le besó los labios. - soy la persona más fiel que conocerás.
Jake sonrió al escuchar eso.
-vale la segunda parte y ¿qué hay de la primera? ¿Quieres decir que vas a emborracharte, fumar y meterte dro...?– se asombró Jake recapacitando. Y luego Serio.
-No, tonto. – dijo sin dejar terminar a Jake – tampoco eso, pero unas copitas no harán daño a nadie
...
Amber se balanceó hasta su amiga.
-April... ¿Dónde está el baño? ¡Me orino! – dijo cruzando las piernas.
-Ven anda, te acompaño. – la cogió del brazo y la llevó hasta el baño. Se metieron las dos en la grande habitación y April cerró con pestillo. – Venga, Am ese par de copas ya están allí, en la cloaca. – dijo observando cómo su amiga se bajaba los pantalones, las bragas y el ruido de los líquidos empezaba a bajar por el retrete. – Vas ya 'contenta', así que basta de alcohol.
Luego te coge una resaca que ni con ibuprofenos pasas.-Vale, vale... - dijo Amber aun consciente de lo que hacía y decía, pero mareada. – ningún cubata más, ni baileys, ni vodka.
-Ni lo de más allá, ¿sí? Que nos conocemos, te mueres por otro mojito.
-No, no, te lo aseguro... - cruzó los dedos.
-Confío en ti... como luego te vea trompa por el suelo, te enteras de quien es tu mejor amiga... - se lo repensó – vamos que si te enteras.
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I'll be your teacher [Terminada]
Novela JuvenilLa profesora de música estaba ausente ¿por qué? Pues se le había enfermado el marido y al parecer era bastante grave, cáncer de hígado, según decía la gente. ¿Esto es algo malo? Bastante, pero lo peor no es que el marido de Pamela estuviera a punto...