LA CHICA MISTERIOSA ( Harry Potter )

Arruinando Citas

Ananda levitó y abrió la mano, levantando el brazo hacia arriba, señalando hacia cielo, este mismo  se empezó a nublar, formándose una especie de tormenta.
Tras esto, Ananda bajó el brazo con rápidez, de tal manera que señalaba hacia el hombre, hizo que un rayo cayera del cielo, casi electrocutando a este individuo. Este mismo, tras ver lo ocurrido, se asustó y no dudó en decir:

—¡Espera! —dijo con voz temblorosa.

—Si consigo ayudar a tu amiga. ¿me dejarías vivir...?

En ese instante Ananda bajó al suelo y asintió con la cabeza. El hombre con mucha prisa se acercó a Ginny y le tomó el pulso, pero tras esto, no dijo nada...simplemente decidió hacerle la maniobra del boca a boca, pero,  Ginny no despertaba.

Lo volvió a intentar y esta vez por suerte, funcionó.

Ginny reaccionó y empezó a toser con fuerza.

— ¡GINNY! —Decia mientras la abrazaba.

—Ya está. Tenia pulso, pero poco, ya que estaba dejando de respirar. Solo tuve que introducirle aire.

Ananda miró a Hermione y dijo:

—¿En serio? Tan lista que te crees y... ¿¡no se te ocurrió tomarle el pulso?!

Hermione la miró con mala cara y tras esto el hombre interrumpió diciendo:

—Pues ya estamos todos bien...oye por cierto, ¿que se supone que eres? Eres una clase de ¿hada? ¿Bruja...? —dijo dirigiéndose a Ananda.

Pero esta misma no respondió, solo abrió la palma de su mano, señalándole y el hombre empezó a levitar por los aires.
Ananda hizo un movimiento rápido con su mano hacia la derecha y el hombre hizo el mismo movimiento con rapidez,  hasta estamparse con un muro, siendo esa su muerte.

—¿QUE HACES? ¡¡LO HAS MATADO ANA!!

Ananda no hizo caso de ese comentario y dijo:

—Ahora si que puedo curar a Ginny.

Ananda posó su mano sobre la cabeza de Ginny y tras unos segundos, ella se recuperó...
No tenia nada magullado y ningún dolor.

—¿Que ha pasado? -dijo tocándose el pecho.

—Ahora te contaremos,  debemos volver con rapidez a Hogwarts, antes que lleguen los policías.

Las chicas volvieron justo por el camino por donde entraron.
Tras cruzar el caldero y el muro , ya estaban en el mundo mágico.
Pero alguien quiso darles la bienvenida.
Era ¡¡Minerva!! Estaba muy enfadada. Se aproximaba un infierno para las chicas.

—Estoy muy decepcionada con vosotras, ningún alumno hizo esto antes.