Capítulo 5

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—Eh… n-no lo creo —trate de hablar ¿Será que me recuerda? No lo creo, pero si no lo hizo antes porque sería ahora— Bueno me tengo que ir, y no estoy huyendo, en serio necesito irme.

—Vale, ¿Es que te espera tu novio? Aunque si es así, Diego se pondrá muy triste.

—Puede ser —salí corriendo, no se ni porque dije eso.

Estar cerca de él, hablar con él me afecta muchísimo, es como si estuviera hablando con alguien sobrenatural, imposible de creer. Pero aun sigo sin poder creer que esté hablando con él. La Ivana del año pasado estaría saltando de felicidad.

***

Es viernes, hoy si que me levanté temprano, quiero llegar bien. Ayer no hemos tenido clases, con lo despistada que soy se me había olvidado que el jueves era feriado. Estaba lista para irme pero mi madre me dijo que no tenía que no tenía que ir.

Pero hoy sí iré, de hecho estoy en camino.

Mañana por la tarde vendrá Matias a mi casa.

Un momento, me detengo a pensar, él no sabe dónde vivo, no me a pedido mi dirección. Mejor así tal vez se olvide, no quiero hacer el trabajo con él porque si estoy más tiempo con él, volveré a ilusionarme.

Aunque si no viene ¿como haré el trabajo? Da igual lo haré sola y luego le dire a la profe, que mi compañero no quiso o no pudo hacer el trabajo conmigo, no creo que sea mala si le digo eso.

No, no lo eres :)

Que bueno.

Ayer les dije a mis padres, que tengo que hacer un trabajo con un compañero, y quizás tenga que venir a casa para hacer el trabajo. Decirles me dio un poco de miedo, recuerdo lo que me dijeron: 

"Esta bien, pero recuerda Ivana, nada de novios hasta que termines tus estudios"

Eso me dio un poco de risa, mi padre me lo dijo muy serio y él no es hombre serio, aunque para esos temas sí lo es. Pero a mi siempre me lo repiten ¿y por qué no a Valeria?

Al fin llegué a la escuela, la caminata me ha servido para pensar y relajarme entre otras cosas. Entro y subo las escaleras, se que aún falta para que empiecen las clases pero no quiero estar en el patio, no quiero encontrarme con Matias. Demasiado con verlo en el instituto.

Pasó rápidamente por el salón de Matías. Creo que no están, eso es bueno.

Entro a mi salón y me siento en mi silla. No hay nadie en el salón, está completamente vacío. Mejor así no hay ningún ruido. Apoyo los codos a las mesa y en ellas apoyo mi cabeza.

Pero la hermosa paz que tenía dura solo unos minutos porque sonó el timbre. Haciendo que me despertará, me estaba empezando a dormir.

—Te estaba esperando en el patio, me hubieras dicho que estabas en el salón —me dice Juliet entrando al salón y un poco molesta.

—Lo siento, se me olvido avisarte —Dije con una sonrisa dulce y amable.

—Vale te perdonó pero la próxima vez avísame, no me gusta estar sola abajo esperándote. 

—No creo que hayas estado sola. —dije para defenderme, estaba haciendo que me sienta muy culpable— Seguramente, estabas buscando algún chico o quizas pasando el rato con algún chico.

—Cómo dices eso —dice con una voz de inocencia así que lancé una mirada que dice ¿en serio? dime la verdad— ¿qué? ¿Por qué me miras así? Te digo la verdad estaba sola. Dejemos de hablar de mí, mejor hablemos de ti…

El Playboy Y ¿la Impopular? [EN PROCESO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora