~20~

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Mi tranquilidad ha aumentado conforme pasó el lluvioso sábado que nos tocó, hablé con Mark por el móvil diciéndole que me iría unos días de su departamento ya que necesito tiempo y algo de espacio por lo menos hasta que termine el caso dejando todo más tranquilo

Ahora me encuentro en la casa de mi abuela recostada en el acogedor sillón mientras chateo con la diablesa, la chica recibió el alta a la noche, me avisó por un mensaje que ahora estaba en su casa con una orden de reposo por al menos tres días más, gracias al cielo las balas no han dañado nada de gran importancia más bien sólo funcionaron para un susto

"Me aburro"

"Pues, desaburrete con algo que no implique movimiento"

"No me ayudas"

Su fastidio por no poder hacer uso de su energía me da una peculiar gracia, en lo que me levanté del sofá por una manta y mi café recibí otro mensaje

"Lo más gracioso es que el doctor me dijo que no debo tener nada de sexo, o sea, nisiquiera tengo pareja señor"

"Aunque la tuvieras, no puedes hacerlo"

"Y por qué no?"

"Una por los disparos y dos, bueno, tu sólo te dedicarías a gemir como una linda pasiva"

Entre risas después de unos segundo contesté a su llamada, me reprochó una agresiva voz...

-Que tonta eres gatita-

Solté otra carcajada...

-Yo no soy la pasiva-

-No eres la pasiva, eres mi pasiva-

-Quién...dijo que yo...soy así?-

-Tú misma cada vez que estoy cerca-

-Mentira-

-No fuiste tu la que me llamó mommy muy felizmente?-

-Pero eso fue...-

Se la escucha bastante avergonzada lo que me provoca aún más risa, es muy tierna la pequeña asesina

-O sea que no querrías gemir para mi?-

-Por qué hablas de eso tan tranquilamente, no está la sangre sucia en la casa?-

-Estoy en la casa de mi abuela, le dije a Mark para tomarnos un tiempo-

Unos segundos de silencio llamaron a mi atención, le di un sorbo a mi café y bajé el volumen del televisor dándole tiempo a la diablesa de que retomara el habla

-Lo siento-

-Por qué?-

-Siento que es mi culpa, bueno más bien es mi culpa-

-No lo es-

Se río entre divertida y algo molesta, difícil descifrar la emoción correcta

-Si que lo es, eres amiga de la asesina de tu cuñadita-

-Eres una boba-

-Es que si, te encariñas conmigo en lugar de odiarme por haber matado a la hermana pequeña de tu prometido-

-Te conozco por ello no te odio, todos deberían hacer lo mismo Mark sólo está encerrado en su odio-

-Un odio justificado-

-No digo que no lo sea, pero quizás debería interesarse en el por qué de los asesinatos-

-Eres de otro mundo gatita-

-Comienzo a creer que si-

-Pues, espero que todo entre ustedes se arregle-

-Mentira no esperas eso-

Ahora la que ríe soy yo por las malas actitudes de mentir, no le sale muy bien fingir amabilidad

-Bueno no, en realidad no pero quise ser amable-

-Buen intento de amabilidad-

-Gracias, la práctica funciona-

El sonido de nuestras respiraciones sordas por la lluvia del fondo nos acogió por unos minutos

-Puedo preguntarte algo?-

-Claro-

-Por qué crees que pasó algo más de lo que ya se sabe?-

-Porque te veo-

-Y qué ves?-

-Un vacío-

La escucho suspirar...

-Crees que todos dejarán de verme como el diablo manchado de sangre si descubren la verdad?-

-Hace quince años encerraron a una niña de once años por matar a sus padres pero nadie vio que quizás esa niña protegía a sus hermanas-

-La misma niña asesinó también a trece niños de entre nueve y once años-

-Por algún motivo que jamás salió a la luz y nadie se preocupó en descubrirlo-

-Para serte honesta, no se si besarte por ser tan dulce conmigo o golpearte por ser tan intensa con mi caso-

-Sabiendo tu habilidad de combate prefiero un beso, gracias-

-De acuerdo, tu ganas-

Ambas nos reímos a través de la línea telefónica, poco a poco veo que la lluvia comienza a relajar su descenso aunque son suertudos aquéllos que ven la belleza en ella

La historia del DiabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora