~My Pretty Dancer~ 《Kookmin》

Mánager

Narra Jungkook

La mañana siguiente había despertado antes que Jimin, sintiendo como su cálido cuerpo seguía en un estado de completa tranquilidad, sus pequeños ojos aún estaban cerrados, seguía durmiendo de forma tan placida, que no quisiera despertarlo.

La noche anterior varias veces Jimin despertaba de su sueño con un susto, aferrándose a mi cuerpo, haciendo que yo también asombrado despertara, y al hacerlo lo único que me pedía es que no me alejara de el, que no lo deje. Al darme cuenta de sus reacciones, instantáneamente, lo envolvía con mis brazos, para que sintiera que me tenia a su lado, que no sintiera miedo, que lo protegería. Mientras acariciaba suavemente su espalda, haciendo movimientos de arriba hacia abajo, dejando besos en su frente, lograba que pudiera nuevamente dormir.

Realmente aquello me había hecho sentir mal, no había podido conciliar el sueño tan fácilmente, estando al pendiente de que Jimin volviera a despertar. Odiaba ver a mi pequeño con miedo, el no actuaba de esa forma, y ahora que me había tocado verlo en ese estado, me confirmaba que no podría dejar que nadie más intentara hacerle daño.

Eran las seis de la mañana y aunque no quisiera, debía ir a mi departamento, y luego dirigirme a la universidad, un examen importante que definiría el final de mi carrera me estaba esperando, realmente me estaba resultando odioso dejar solo a Jimin, por cosas como estas, sin embargo era algo que no podría dejar pasar, aunque lo quisiera.

Trato de moverme un poco de lado, haciendo la menor presión posible para que Jimin no logre incomodarse, y que por ende despierte. Me remuevo un poco más, quitando las sabanas que cubrían mi cuerpo, bajando las piernas al costado de la cama, ya solo faltaba mi torso y estaría fuera de riesgo, sin embargo cuando creí que lo lograba, escucho un pequeño gruñido, acompañado de una vocecita ronca y que sonaba muy somnolienta.

- A donde vas? (Pregunta aun con los ojos cerrados)

- Lo siento, no quise despertarte Jiminie (Me acerco a su mejilla dejando un casto beso en ella) - Dormiste bien?

- Primero, si... dormí bastante bien, y segundo por que te levantas?? (Menciona con un puchero en sus labios)

- Debo ir a la universidad, tengo un examen importante que había olvidado, es el ultimo antes de graduarme cariño, prometo que lo termino y volveré aquí lo mas rápido posible.

- Discúlpame por haber hecho que te quedaras, de seguro debías estudiar y yo aquí haciéndote perder el tiempo.

- Nunca serás una perdida de tiempo. (Deposito un beso en sus labios regordetes) - Volveré pronto, prométeme que te quedaras aquí, y no le abrirás la puerta a nadie. De acuerdo?

- Supongo que Arthur no vendrá, solo lo hace los fines de semana, que son en donde tengo más... (Se queda en un repentino silencio, acompañado de un suspiro, y sigue) - Trabajo..

- Hey, estas hermoso (Levanto su barbilla para que siga mirándome) - Eres hermoso, y eres mi chico sabes?

- Aun no... (Responde con una leve sonrisa, para luego unir nuestros labios en un tierno beso)

Minutos mas tarde, ya me estaba encaminando a la universidad en el auto, pensando en todo momento en Jimin, arrepintiéndome de dejarlo solo siquiera un solo segundo, sin embargo sigo conduciendo con velocidad, hasta llegar a mi destino. Luego de estacionar el carro, bajo dirigiéndome a la entrada, caminando por los largos pasillos hasta que me encuentro a Namjoon, porque si (Un detalle que olvide mencionar desde el principio) el, al igual que Yoongi, estudiaban en la misma universidad que la mía, fue la forma en la que nos hicimos amigos.

Al verme, rápidamente se acerca a mi, con una sonrisa.

- Jeon, amigo como estas?? No supimos nada de ti en estos dias, paso algo?

- En realidad si, pero les contaré luego, tengo un examen en unos minutos y la verdad es que no se si pueda hacerlo bien.

- Te noto raro, pero tranquilo, estoy seguro de que te ira bien, le hablare a Yoongi, de esa forma al salir nos vamos a la cafetería y charlamos.

- Me parece buena idea.

Me despido de Nam y acelero mis pasos hasta llegar al determinado salón de clases.

Una hora y media después, mi examen estaba terminado y entregado, la verdad para mi buena suerte, no estuvo muy complicado, y como siempre ponía atención a estas clases, se me hizo sencillo responder las preguntas, con mis propios términos, ya que, ese es el punto no? Responder con lo que lograste comprender... Genial, dejando eso de lado, ya me encontraba esperando a Nam y Yoongi, en la cafetería, solo estaría unos minutos, ya que le hice la promesa a Jimin de que volveria lo antes posible.

Luego de comprar un sándwich y un jugo de naranja, veo a ambos chicos acercarse hacia mi, sentándose en la misma mesa.

- Ingrato, que fue de ti en estos días? (Menciona Yoongi, sin antes saludar)

- Es por eso que estamos aquí, estoy bastante preocupado por...

Volteo a ver a Namjoon quien se encontraba en silencio, y con el seño fruncido, ya que no ha dejado de ver lo que parecieran ser documentos, o noticias en su laptop desde que había llegado.

- Pasa algo Nam? (Pregunto, mientras Yoongi gira a verlo de igual forma)

Alza la mirada hacia nosotros, algo confundido.

- Oh, lo siento Jungkook, pero lo que pasa es que en una de nuestras practicas profesionales tras un caso judicial, nos toco el caso de un hombre, el cual fue acusado en innumerables ocasiones de cometer trata de blancas, por ende es considerado uno de los más complicados actualmente.

- Y saben donde está? (Pregunta Yoongi, con interés)

- Su paradero se conoce desde hace mucho tiempo

- Y por que no solo lo detienen entonces?

- Exacto, eso es lo que lo hace complicado, ya lo detuvieron una infinidad de veces, sin embargo por falta de pruebas y obviamente porque es un hombre con mucho poder, según sus antecedentes, de esa forma para el, su libertad, solo le cuesta unos cuantos millones de dólares.

- Es alguien peligroso supongo. (Menciono, raramente intrigado)

- Bastante, además de que posee uno de los bares mas famosos de Seúl, y hasta hoy en día, no han podido cerrarlo, ni mucho menos acusarlo correctamente, por falta de pruebas. Y todo es tan agotador porque, no tenemos idea de como conseguirlas para lograr validar este caso, seria la única forma en la que sus acusaciones tengan su debido peso, y la cárcel sea algo de la cual no lograría escapar más.

- Y cual... es su nombre? (Pregunto algo nervioso, por la repentina información)

- Ammm (Observa nuevamente la pantalla de su laptop, para luego mostrarme una foto de aquel hombre del que hablaba) - Arthur Vólkov, es un maldito ruso.

Observo la pantalla, mientras una ola de ira inunda mi ser, siento como cada musculo se tensa ante una sola imagen, ante un solo rostro...

- Él, es el mánager de Jimin...