Parte sin título 22

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(Omnisciente)

Sentía el viento golpear su cara al correr, había vendado minutos antes su mano parando la hemorragia; tenía que buscar algunas cazadores para ayudarlos, se detuvo abruptamente al llegar en un claro iluminado por la luna, pudo divisar a 3 personas en ese momento las cuales parecían estar discutiendo por algo.

- ¡No te preocupes utilizare un veneno que no la hará sufrir! – Shinobu tenía intención de atacar a la menor de los Kamado la cual yacía siendo protegida por su hermano, Tomioka se puso al frente estorbándole el paso a la morada - ¡Ara! Tomioka-san ¿Sabes que estas rompiendo las reglas de los cazadores, ¿no? -

Sin respuesta

Himawari miro sorprendida las acciones del azabache al proteger a Nezuko era extraño para ella también ¿Cómo era posible? Era un pilar y entendía por qué Shinobu había reaccionado así después de todo Nezuko es un demonio.

Pero estaba claro que si ella no hacía nada comenzaría una pelea, pero no sabía que hacer después de todo ellos eran pilares y Himawari una simple mizunoto.

- ¡Mi hermana no ha hecho nada! – gritaba el de cabello burdeos, Tomioka se acercó a él murmurándole algo, a simple vista el cuerpo de Tanjiro estaba sumamente lastimado se esforzaba por levantarse

La mente de Himawari era un montón de dudas, por otra parte, quería ayudar a esos dos, pero viendo el lado más lógico no los conocía tanto y aunque les haya caído bastante bien era mas que probable que se metería en problemas.

Pero al ver las acciones de Tomioka el cual los protegía no tuvo mas remedio que hacer lo correcto

Himawari apareció al lado del menor tratando de ayudarlo para que comenzara a correr con su hermana, Shinobu no espero para abalanzarse para atacar a la menor de los Kamado, pero fue inútil Tomioka había bloqueado su ataque.

- ¡Tomioka-san! – dijo Shinobu molesta – lo que estás haciendo es algo muy grave...además- miro a la de ojos naranjos - ¿Tú también? Youka no estará contenta con tus acciones-

Aquella mención de su hermana la hizo congelar en su sitio.

Entendía los problemas que podían suceder al estar protegiendo a un demonio, pero ¿Seria lo bastante hipócrita para no hacerlo? Después de todo estuvo conviviendo con uno por unos largos meses.

Ya estaba inundada de problemas desde hace mucho tiempo, meterse en otro no haría ninguna diferencia.

-Himawari – murmuro el azabache llamando su atención – Te encargo a esos dos – la nombrada asintió y corrió junto con Tanjiro vigilando que nadie los atacara.

- ¡Muchas gracias Hoshika...- no pudo terminar de hablar ya que fue derribado por Kanao

- ¡No lo golpees, espera! -

- ¡Déjame a mí, ayuda a mi hermana! - Tanjiro como podía quería zafarse de Kanao, en una de esas la menor le había dado una patada en la cabeza noqueándolo en el proceso, Himawari empezó otra vez a correr junto con la caja.

Un sonido hizo que la ojinaranja se detuviera al ver a Nezuko salir de un salto corriendo hacia su hermano, Kanao la intercepto atacando a Nezuko que se había vuelto pequeña.

Entre esquivadas y saltos de las dos, Himawari se acercó bloqueando un ataque de la menor con su espada, Kanao se quedó paralizada unos momentos no tuvo más remedio que alejarse para retomar la persecución.

Todo se detuvo cuando un cuervo sobrevoló gritando que llevaran a los hermanos Kamado hacia la residencia.

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