||♦♦||
JANG KEUN SUK
Melody. Ese era el nombre de quién veía llorar en este momento. Ese era el nombre de quién parecía haber perdido las ganas por la vida justo ahora cuando hace un tiempo atrás la había visto sonreír con esa sonrisa pálida que a pesar de todo, iluminaba su rostro.
¿Quién era ella realmente?
A veces tan tímida, a veces tan ciega a sí misma. Esa forma tan formal de vestirse, los sacos oscuros, los pantalones de mezclilla, su cabello largo atado a la mitad con un adorno, sus ojos grandes llenos de... Inseguridad.
Melody era algo más de lo que quería mostrar, Melody era esa persona de la que no hablan en los medios respecto a como son las chicas latinas.
Melody era esa parte oscura a la que nadie le tomaba importancia pero brillaba más que la luna y las estrellas juntas.
Era simplemente de quién había pensado mal al hablar así de ella con Gun Sama.No sé que pesaba más pero el arrepentimiento me hizo quedarme dentro de mi auto y observarlo todo.
Lo había visto todo, la misma Melody que conocí y de la que había pensado tantas cosas malas solo por dejarme llevar y recordar lo que me había pasado hace años ahora estaba afuera, gritando con la misma persona que parecía ayudarla en todo y nunca querer separarse de ella.
No sé que era David de Melody, solo sé que había algo que él no podía ocultar y ese era ese sentimiento que se veía a través de sus ojos cada que la miraba, ese miedo a que me acercara cada vez que ella me sonreía. Él siempre tenía que estar ahí, siempre.
Este era mi momento de ofrecer una disculpa por todo lo que había hecho, mi disculpa no iban a ser solo palabras, iba a hacer algo para ayudarla y no dejarla aquí tan sola, cuando más necesitaba a alguien.
Las coincidencias no existían, creía en eso porque cada "coincidencia" no era más que un camino al destino.
Había salido tarde de la compañía, me quedé con el señor Kang mientras todos se iban. De pronto, cuando quise despedirme de Melody mientras me decidía a disculparme por completo, me di cuenta que se había ido.
Entré a mi auto, olvidando donde había puesto el guión, eso me hizo quedarme hasta que los vi bajar por el elevador, discutían, uno y otro gritaban cosas que no entendía. Gritaban como dos locos, tiempo después él se fue dejándola ahí donde ella caminó bajo la lluvia sin que nada le importara, desde aquí la veía tan frágil... Tan pequeña para defenderse. Sin ánimos para continuar, sin nadie a su lado.Lo pensé unos segundos más, ella no parecía moverse. Ella no tenía la culpa de lo que sea que haya pasado, ella no era como las chicas a las que Gun Sama describía, ella era diferente. Quizá tan frágil como la nieve.
Sin más, bajé de mi auto con el paraguas que siempre tenía dentro.
Solo quería abrazarla y decirle que no había nada de que temer, que estaba a su lado si es que ella me lo permitía.
ESTÁS LEYENDO
FRAGILE LIKE SNOW
RomanceEmpezaba a nevar, los copos de nieve se derritieron en sus mejillas, para mí al caer lucían como sus verdaderas lágrimas, estaba seguro que mi confesión de amor por ella desvaneceria nuestra amistad. Sin embargo una vez que sostuve sus manos frías m...