THIRSTY KISS

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TRES DÍAS DESPUÉS

           —Prueba esto —. Exigió dándome un trozo de su creación.

Sin dejar de mirarlo de manera desconfiada, abrí la boca. Keun Suk me dió el trozo de carne.

—¿Te gusta? — Insistió sin dejarme pasar el bocado aún.

—Espera, me voy a ahogar —. Dije con la boca llena. Casi sin masticar, pasé el bocado dándole pulgares arriba a Keun Suk —Me encantó. No entiendo si me gusta más el chef o el cantante.

—Escoge a uno, no te puedes casar con los dos. —Sentenció.

—¿Por qué? Tengo dos manos y solo un anillo —. Levanté mi mano mostrando el anillo que me había dado.

—Por que no te puedes casar con los dos aunque los dos sean irresistibles.

—Entonces buscaré quien me ponga un anillo en la otra mano.

—¡Melody! —. Gritó molesto. Sus gestos de hombre celoso me hicieron reír internamente ya que no podía reír fuertemente si no quería hacerlo enojar más.

—Es la verdad.

—¡¿Acaso quieres que alguien más ponga un anillo en tu otra mano?! —Seguía gritando.

—Ay ya no es para tanto

—A ver quién te lleva a la ceremonia. —Susurró.

—¡Celoso!

—Me iré a acostar, me avisas cuando llegues.

Sabiendo su debilidad, corrí a él abrazándolo por detrás.

—¿Celoso?

Keun Suk quiso hacerse el fuerte hasta que lo escuché reír.

—¿Sigues celoso? —. Pregunté viéndolo a la cara asomandome por un lado de su cuerpo

—Ya vamos, se nos hace tarde.

Keun Suk y yo seguimos preparando la comida para la ceremonia, aniversario luctuoso de la muerte de mi madre. Después de lo que pasó hace tres días, él decidió querer hacer algo por la persona que me trajo al mundo, Keun Suk era del pensamiento que la gente se lleva en el corazón, no es necesario estar cerca de ellos para hacerles saber que los tenemos presentes.

La misma barrera que parecía separarnos al principio, el de la cultura, nos unía hoy más que nunca, Keun Suk quería hacer está celebración al estilo que ellos acostumbraban.

Nos habíamos levantado muy temprano para preparar todos los deliciosos platillos que Keun Suk anotó en una lista una noche anterior, de aquí iríamos al centro ceremonial rindiendo honores a mi madre.

FRAGILE LIKE SNOWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora