𝑬𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒂 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒋𝒆𝒇𝒂 𝒈𝒓𝒖ñ𝒐𝒏𝒂 ( 𝑪𝒂𝒄𝒉é )

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 1. ¿𝓣𝓾 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓷 𝓮𝓻𝓮𝓼?

Hoy es mi primer día en las empresas Garzón, no puedo evitar sentirme nerviosa debido a la mala fama que tiene mi futura jefa. Realmente espero que me valla bien, yo no soy una mala persona y siempre he echo bien mi trabajo, seguro y asta le caigo bien.

O por lo menos eso espero....

Me levanté de mi cama y me fui a darme una ducha para quitarme un poco los nervios. Me puse una falda negra de tuvo que me quedaba un poco más arriba de las rodillas, con una camisa blanca de manga largas y unos tacones negros. Me maquillé y arregle mi cabello dejándolo liso. Me veía bien así que sonreí al espejo, espero y este sea un atuendo adecuado para la oficina.

Salí de casa y tomé una taxi asta la oficina donde del recorrido se me hizo un poco más largo mientras pensaba en por qué todo el mundo hablaba así de la CEO, rogaba a quién fuera por qué todo fuera bien en mi primer día.

Al llegar al edificio fui rápidamente al piso donde me debían dar todas mis instrucciones para mí puesto de trabajo y ahí ví como me esperaba el mismo hombre que me hizo mi entrevista.

- Señorita Calle ¿Me recuerda?

- Nicolás, de Recursos Humanos ¿Cierto? - pregunto por si las dudas.

- Si señorita - dice mientras asiente.

- Entonces, ¿Que debo hacer? - pregunto un poco ansiosa.

- Como sabrá será la secretaria de la señora María José - ¿Señora? A lo mejor y es una mujer mayor, con más razón no pienso que pueda ser tan cruel como me la describió Paula.

- ¿María José?

- Si, ella es la CEO de la empresa - asiento - en su trabajo tendrá que organizar archivos, recibir llamadas, organizar todas sus citas y reuniones entre otras cosas que ya le indicara la señora Garzón - dice y le escucho con atención para no equivocarme con nada - aquí está todo lo que necesitará para su trabajo - dice mientras me entrega una caja - la señora Garzón está ahora mismo en su oficina, ella está al tanto que empiezas con tu trabajo hoy, así que sube y preséntate ante ella lo antes posible - hace una pausa - ella odia las impuntualidádes así que mucha suerte, creme que las vas a necesitar.

- Muchas gracias - el asiente y se retira.

Me puse muy nerviosa solo con ver la cara de lastima que me lanzó el señor Nicolás al decir las últimas palabras.

¡Joder! Que todo el mundo se equivoqué por favor...

Me subí en el ascensor y marqué el último piso ya que ese era el que me había indicado el señor Nicolás. Al abrirse las puertas me encuentro en un piso muy amplio de paredes blancas con algunos detalles en negro, con persianas de cristales, sofas enormes, tres oficinas y dos chicas que al parecer son secretarias también.

- Tu debes ser la nueva ¿Cierto? - me giro para ver de dónde provenía la voz y me encuentro con una de las chicas que ví hace un rato.

- Si, soy yo - le respondo a su pregunta.

- Me llamo Camila Cabello - me da su mano - mucho gusto.

- Daniela Calle, pero puedes decirme Calle - estrecho su mano - el gusto es mío.

- Kim ella es la nueva, Calle - dice Camila con una sonrisa.

- Mucho gusto Calle -me dice con una sonrisa amable.

- Igualmente - salido con una sonrisa.

Estás chicas son geniales, se ve que son unas buenas personas.

- Calle, ese de allá es tu escritorio - me acerco a el y dejo todas mis cosas - y esa de allá es la oficina de la Ogra - dice Camila y Kim le da un codazo - auch, lo siento, pero no vas a tener una muy buena jefa Calle - me dice dándome una mirada de pena.

¡¡Otra más!! ¡¿TAN MALA ES?!

- ¿Tan mala es? - no dudo en preguntar y es Camila la que me contesta.

- Súper mala, todos en este edificio le tenemos miedo. Solo basta con que diga una palabra y tú ya quieres salir corriendo - tragó saliva.

- Ya basta Mila, vas hacer que Calle salga corriendo antes de que Garzón la haga correr - volví a tragar en seco - suerte Calle, vamos a dejar que te pongas al día, no vemos a la hora del almuerzo - asiento - adiós.

- Adiós chicas - me despido y tomo mi carpeta y me acero a la cueva de la misteriosa Ogra, no puedo evitar la sonrisa que me sale al pensar en ese sobrenombre.

Me acerco a la puerta donde veo una placa en dorado con el nombre de María José Garzón, bonito nombre. Doy suaves toques en la puerta pero nadie contesta, así que me tomo el atrevimiento y habro la puerta despacio para encontrarme con una oficina enorme con paredes en blanco y negro, cortinas rojas y un escritorio de cristal muy grande.... Sinceramente es una oficina que llama mucho la atención.

Atrás del escritorio se encuentra una mujer de espalda hablando muy molesta por celular frente a un gran ventanal que tiene una hermosa vista de Bogotá, cualquiera mataría por esa vista.

- ¡Eres un estúpido Samuel! ¡No sirves para nada! -suspira - escúchame bien ya que no lo volveré a repetir, si no me traes ese contrato hoy vas a encontrar tu carta de despido a primera hora mañana en tu oficina - dice por último y yo me sobresalto al ver cómo estrella su celular con una de las paredes quedando este totalmente destrozado.

Al girarse se sobresalta al no esperar encontrarme hay. Y.... Yo no puedo evitar quedar con la boca abierta, ¡¡Dios mío, pero si está mujer es guapísima!! Lleva una camisa manga larga de color blanco, un chaleco de color negro bien ajustado a su cuerpo que a simple vista se ve escultural y lleva un pantalón del mismo color igualmente ajustados a sus piernas.

- ¿Tu quien eres? - no duda en preguntar y yo levanto mi vista a su rostro encontrándome con los ojos más hermosos que e visto en mi vida, son de un color aceituna preciosos, ¡Dios esta mujer es hermosa!

- Yo... Yo... Soy... - Dios que nervios.

- ¡Tu quien carajos eres! - vuelve a preguntar esta vez más enojada.

- Calle... S-su nueva secretaria - dije esta vez más claro frente a la mirada intimidante de esta mujer.

Se me queda observando por unos minutos como tratando de analizarme y grabar cada parte de mi. Me sonrojo de inmediato al verme tan pequeña ante su mirada.

- Y se puede saber ¡¿Con que derecho te crees tú para entrar a mi oficina sin tocas?! - me grita con enojo y yo bajo la mirada.

- He.... B-bueno y-yo toque y toque pero usted no contestaba.... Entonces e-entre s-solo para ponerme a su disposición - explico y ella se me queda observando para después suspirar y cerrar los ojos un segundo.

- ¿Ya le dieron sus instrucciones? - ¡Dios que manera de cambiar de pregunta!

- S-si señora.

- Entonces no hay más nada que decir, ya sabe todo lo que tiene que hacer así que no pierda más su tiempo y comienze cuánto antes su trabajo - me dice mientras acomoda su asiento para sentarse.

- Si señora - me giro para salir pero escucho de nuevo su voz.

- Ah, ¿Señorita?

- Si - me giro y me quedo al frente de ella viendo como está arreglando unos documentos de su escritorio para levantar la vista y verme fijamente, ¡Dios está mujer tiene una mirada hermosa!

- No vuelva a entrar sin tocar, ¡Entendido! - me dice firme.

- No se preocupe, quedó claro - le respondo y ahora sí me giro para salir de la cueva de esa gruñona engreída, ¿Cómo se atreve a gritarme de esa forma? No sé cómo una mujer tan hermosa pude ser tan fría.

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Aquí les dejo este capítulo, por favor no duden en comentar y dejar sus votos.

Este es el capítulo decisivo, si gusta seguiré con la historia y si no ya ustedes saben.