𝑬𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒂 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒋𝒆𝒇𝒂 𝒈𝒓𝒖ñ𝒐𝒏𝒂 ( 𝑪𝒂𝒄𝒉é )

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 3. 𝓜𝓪𝓽𝓾.

•• P'ov Calle ••

Un mes después.

Ha pasado un mes desde mi primer día de trabajo en las oficinas Garzón, un mes en el que mi jefa estuvo apunto de besarme, un mes en el que no he dejado de pensar en su rostro cerca del mío y en el dulce aroma que ella desprende, un mes en el que he tenido que sorportar su malhumor, gritos y sobre todo su ignorancia; es como si yo no existiera, lo único que hace es hablar de trabajo y ni siquiera me dice un buenos días Calle ni nada. No entiendo cómo una mujer puede ser más fría que un témpano de hielo y puede estar tan tranquila con eso mientras yo no dejó de pensarla como una idiota mientras me preguntó por qué me duele tanto su comportamiento, de sentir esa sensación extraña en mi estómago cada vez que la veo o que nuestras miradas se cruzan y hace que mi mundo se detenga solo para seguir pensando en ella.

¡Maldita María José! ¿Que estas haciendo conmigo?

- Disculpe Señorita - me dice una joven de piel blanca, pelo negro, ojos del mismo color, alta y con un vestido en blanco muy ajustado a su cuerpo hace que salga de mis pensamientos.

- ¿En que la puedo ayudar? - pregunto amablemente y con una sonrisa.

- Necesito pasar para ver a Poché - ¿Poché? ¿Quien es Poché.

- Disculpe ¿Poché? - pregunto desconcertada.

- María José.

- ¡Oh! Por supuesto, ¿Tiene cita? - Mmm que extraño apodo tiene mi jefa.

- No, no tengo - dice ya un poco impaciente.

- Entonces Señorita no podrá verla hasta solicitar una cita, tengo órdenes estrictas de no dejar pasar a nadie a menos de que tenga una a menos que usted quiera esperas que la señora se desocupe y pueda atenderla - le informo amablemente.

- ¡Mira niña estúpida! ¡Yo no voy a esperar nada! - me grita fuerte y con molestia en su rostro.

- Señorita, ¿Se puede calmar? - le pregunto un poco molesta por su actitud debido a que yo solo estoy siguiendo órdenes.

- ¡No, no me puedo calmar! ¡Así que llama a Poché y dígale que su novia Matu necesita verla! - grita de nuevo y a mí se me hace un nudo en el estómago al escuchar sus últimas palabras ¿Su novia?

- ¿S-su novia?

-Si, así que dígale que estoy aquí - dice está vez más calmada pero aún con enojo en su rostro.

- Un momento, déjeme avisarle - ella asiente y yo tomo el teléfono para llamarla a su oficina.

- ¿Si?

-Señora aquí hay una señorita llamada Matu que dice que necesita verla.

Escucho por unos segundos silencio en la otra línea asta que escuchó un suspiro - Déjala pasar Calle - dice y cuelga.

- ¿Y? - me pregunta con una sonrisa de suficiencia y con cara de TE LO DIJE PERRA.

- Adelante, la está esperando - le informo con un hilo de voz.

- Adiós Taradita - dice con una sonrisa mientras entra en la oficina de mi jefa.

Me siento estúpida y con ganas llorar con solo de pensar en lo que me dijo esa idiota, no puedo evitar que me duela que ¿Poché? Tenga novia. Pero es que ¿Cómo no va a tenerla? Ella es demaciado hermosa, cualquier mujer moriría por estar con ella.