𝑬𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒂 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒋𝒆𝒇𝒂 𝒈𝒓𝒖ñ𝒐𝒏𝒂 ( 𝑪𝒂𝒄𝒉é )

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 46. 𝓨𝓪 𝓮𝓼 𝓱𝓸𝓻𝓪 𝓭𝓮 𝓺𝓾𝓮 𝓭𝓮𝓳𝓮𝓼 𝓭𝓮 𝓱𝓾𝓲𝓻.

••P'ov Poché••

Encontrarme a Laura en aquel lugar se sentía como revivir todos nuestros malos momentos del pasado. Sentía dolor al verla, decepción al escucharla y rabia porque algo me decía que aún no tenía que irme de ese lugar.

¿Qué era lo que pretendía? ¿Por que tanto empeño en querer explicarme algo que sucedió hace años ? ¿Por que es tan importante para ella?

Tantas preguntas a las que solo ella tenía respuesta.

—¿Por que piensas que aceptaré tu condición? — la desafíe con la mirada — sabes perfectamente que puedo hablar con mi abogada y pedir una orden de alejamiento para no tener que verte nunca más.

Ante mis palabras ella sonrió segura y me dijo —Porque ya es hora de que dejes de huir del pasado y puedas hacer algo esta vez para que tu futuro no se vaya a la mierda.

La mire un segundo y suspiré, ¿Qué mas podía perder si la escuchaba? Mi vida ya se había convertido en una completa mierda.

—Habla, y después de esto, desaparece — dije seria.

—Si después de que me escuches esa sigue siendo tu desición.... La respetaré — asentí.

—Desde el inicio.

—¿Recuerdas el inicio de tu carrera? — asentí confundida.

—Si, tuve que hacer un viaje de un mes donde se me presentó la oportunidad de un negocio que me iba dar todo el capital que necesitaba para iniciar mi propia empresa — ella asintió.

—Unos días antes de que llegarás de ese viaje me llegó un sobre negro, color mate. Me pareció muy extraño ya que no conocía a nadie que tuviera ese método de envío — fruncí el ceño y ella continuó — ese día tenía una entrevista con alguien que estaba interesado en que yo fuera la nueva cara de su marca de ropa interior y no tuve tiempo de ver ni abrir ese sobre, así que lo deje en la mesa junto a todos los demás y seguí mi día normal como cualquier otro.

—Estas dando muchas vueltas...

—Necesito que sepas toda la historia Poché, por favor solo escúchame — asentí y pedí otro trago — el día antes de que regresaras, empecé abrir la correspondencia y por último recordé y mire el sobre, no tenía nombre, remitente, dirección, nada, absolutamente nada. Lo abrir y... — suspiró y los ojos se le llenaron de lágrimas — eran fotos "Tuyas" con una modelo francesa...

—¿De que demonios me estas hablando? — pregunté con rabia.

—Te juro que no te estoy mintiendo, no estoy intentado manipularte ni mucho menos culparte de lo que paso.... Pero si, esas fotos en el momento me hicieron ver que me estabas siendo infiel y que por eso tu viaje era tan largo — se tomó de un sorbo su Copa de vino y pidió otra — sentí que mi corazón se partió, me llene de rabia, de dolor, de ira.... Sentí que todo lo que llegamos a soñar juntas te importaba una mierda, que no me amabas lo suficiente y por eso habías encontrado a alguien más.

—No conozco a ninguna modelo francesa Laura, ni siquiera salía de mi hotel a otra cosa mas allá que fuera las reuniones de trabajo que tenía a diario.

—Lo se... — sonrió irónicamente — me di cuenta muy tarde de eso. Con todos esos sentimientos yo solo tome una chaqueta y me fui al primer bar que conseguí, me pedí un trago y ese se convirtió en dos, tres y cuatro. De algún modo también me conseguí a Sebastián en ese lugar — al escuchar ese nombre sentí todo mi cuerpo tensarse — el estaba sumamente ebrio, ni siquiera me reconocía o sabía quien era yo por mucho que le dije mi nombre. El solo intentaba coquetear conmigo hasta que estuve en la mismas condiciones donde no tenía control sobre mi.... Ya lo último que recuerdo fue ver la mirada que me diste al día siguiente en mi departamento, los gritos, los insultos y la forma en la que te fuiste.

—Yo... Lo siento, no creo nada de lo que me estas diciendo —dije sincera y me Levante con la intención de irme del lugar pero ella me tomó del brazo.

—No te vayas por favor. Tengo pruebas de todo lo que estoy diciendo — la mire de forma seria — te juro que así es.

—Necesito verlas, porque no creo nada de lo que has dicho.

—Las tengo en mi departamento, puedes ir a verlas si quieres — al escuchar eso me volví a sentar en mi silla. Estaba ebria y no era muy conciente, pero sabía que eso no era una buena idea. Estaba dolida por todo lo que había sucedido con Calle, pero no iba a cometer errores por eso, no iba a lastimarla así.

Negué —No puedo, no en este estado — ella sonrió de lado y asintió.

—Se lo que estas pensando y tranquila, no pienso hacer nada. Se que amas a tu esposa — al escuchar eso mi corazón se oprimió. Calle.... ella estaba en un hospital y yo aquí con el corazón roto — estoy aquí para ayudarte y hacerte ver que no debes perder al amor de tu vida por no querer ver mas allá de tus narices — fruncí el ceño ante sus palabras.

—¿De que estas hablando Laura? Yo en ningún momento he dicho que estoy aquí por ella.

—Se mas cosas de lo que imaginas — me dijo sería y miro a los lados discretamente — no puedo decirte todo Poché, pero vi la forma en la que tu esposa te mira, ella te ama — mis ojos se llenaron de lágrimas y tuve que mirar a otro sitio — no todo en la vida es blanco y negro ¿Sabes? A veces hay un punto gris en el cual debemos fijarnos mas que en otra cosa — analice las cosas que me decía he hice una mueca.

—Yo... Debo irme Laura — dije levantándome.

—Si te vas así echaras todo a perder — volvió a mirar a los lados — hay personas de la prensa en este lugar a las cuales le vendieron la exclusiva de ver como la gran empresaria mas cotizada de todo el país le es infiel a su esposa.

—No le sería infiel a mi esposa — dije entre dientes.

—Lo se, pero si quieres saber todo lo demás tienes que confiar en mi.

—No confió en ti.

—Tienes que hacerlo — dijo mientras se levantaba y con una sonrisa tomaba mi brazo — sigue la corriente.

Entrecerré los ojos pensando en lo que debía hacer. Esto podía ser una trampa y a pesar de todo yo no sería capaz de dañar a Calle de esta forma.

—Por favor Poché — me deje guiar de ella y ambas salimos del lugar recibiendo las miradas de muchas personas — sube — me dijo una vez estábamos en frente a su auto.

—Laura, yo no pienso hacer nada contigo y esto se puede malinterpretar.

—Esa es la idea. Súbete María José — respire profundo he hice lo que me dijo. Al ella entrar soltó un suspiro y comenzó a conducir para salir del lugar — de ahora en adelante tienes que hacer cosas que tal vez no quieras para poder descubrir quien esta detrás de todo esto; del sobre que nos separó, y de ahora el engaño de Daniela.

—¿Por que piensas que te haré caso?

—Porque la amas y se lo mucho que necesitas aferrarte a algo que te de la tranquilidad de que ella también te ama — me miró — porque ella te ama y tu lo sabes aunque intentes inventar mil ideas en tu cabeza que te haga pensar lo contrario — volvió su vista al volante — y porque ya es tiempo de que seas feliz, si no es conmigo, prometo ayudarte en todo lo que pueda para que lo seas con ella.

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Holissssss!! aquí les dejo la actualización de esta hermosa historia, espero les guste, voten y comenten. Se les quiere.