Suspiré cuando salimos de una de las tantas tiendas en la que habíamos entrado. Estábamos cargadas de bolsas y prácticamente llevábamos todo el día de tienda en tienda. Observé el reloj en mi muñeca y observé que eran las 5:00 de la tarde, con razón ya me estaba pegando el hambre y se los hice saber a las chicas que estaban felices y contestas, me gustaba verlas sonreír, sin duda esa era una imagen preciosa que no me cansaría de ver nunca.
—Mis amores — dije y ambas me miraron — Ya como que es hora de que comamos algo, es tarde.
—Yo también tengo hambre — dijo Vale y Calle y yo sonreímos.
—Entonces vamos a comer algo niñas — dijo Calle aún con la sonrisa en su rostro — ustedes los Garzón comen demasiado — reímos.
—Te recuerdo que tú también eres una Garzón, así que ya eres parte del club — Calle abrió los ojos como platos y me reí de ella.
Empezamos a caminar hasta el estacionamiento donde había dejado mi auto, al llegar abrí el maletero y comencé a guardar todas las bolsas de las compras que habíamos echo para después ayudar a las chicas a subir y de último subirme yo.
—¿Y que vamos a comer? — preguntó Val y yo miré a Calle.
—¿Ustedes qué quieren comer? — preguntó Calle.
—¿Lasaña? — pregunté está vez yo y ambas parecieron estar de acuerdo con eso.
—Por mi está bien, sabes que amo la lasaña — dijo Calle.
—Vale, yo también quiero lasaña, tengo mucho tiempo que no como eso — dijo Val y comencé a conducir camino a uno de los mejores restaurantes de la ciudad.
—Lasaña será entonces.
Mientras conducía Calle conecto su celular al reproductor y colocó una música suave, se sentía tranquilo el ambiente y yo no podía estar más feliz de estar con ellas. Calle era completamente la mujer a la que amo aunque no le haya dicho eso aún a ella con palabras textuales, se que la amo, ¿Cómo? ¿Cuando? Ni siquiera yo sé cómo ni cuando paso, solo ocurrió de un momento a otro y el sentimiento de amor me golpeó en la cara como un bate.
Al llegar al sitio donde comeríamos me baje del coche y le abrí la puerta a Calle quien me agradeció con un beso en los labios y después abrí la puerta de atrás para ayudar a Vale a bajar quien se veía bastante emocionada.
Llegamos a la entrada donde de encontraba un hombre con un uniforme y este nos preguntó:
—¿Tienen alguna reserva? — preguntó serio.
—No, pero me gustaría una mesa en la terraza de la parte superior — pedí del mismo modo y Calle pasó su mano por mi brazo y tomó la mano de Vale con la que tenía libre.
—Síganme por favor — pidió y nosotras lo
seguimos hasta el interior del restaurante el cual era bastante precioso y lujoso, pero lo que más me gustaba era que su comida era una maravilla — aquí tienen, espero que sea de su agrado.—Muchas gracias — agradecí mientras nos sentabamos en nuestros puestos.
—Espero que les guste y en breve alguien vendrá para atenderlas — asentí y se retiró.
—Este restaurante es precioso — dijo Calle mientras observaba todo a su alrededor.
—Si, es uno de mis restaurantes favoritos — dije sonriendo — y su comida es espectacular — dije orgullosa de mi elección.
Esperamos unos cinco minutos cuando un mesero llegó a atendernos y cada una pidió su plato de lasaña. Comimos entre risas, pláticas y alguno que otro chiste de parte de alguna de nosotras. Las personas que estaban ahí se nos quedaban viendo y muchos de ellos sonreían con ternura.
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𝑬𝒏𝒂𝒎𝒐𝒓𝒂𝒅𝒂 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒋𝒆𝒇𝒂 𝒈𝒓𝒖ñ𝒐𝒏𝒂 ( 𝑪𝒂𝒄𝒉é )
Random- Esto no va a pasar - digo sosteniendo aquellos papeles entre mis manos aún sin llegar a levantar la vista. - No tienes otra opción Calle, esa es la única forma en la que quiero que me pagues - levantó mi vista encontrándome con esos ojos que me m...