『Sugar mommy』❁Bughead || C O M P L E T A.

Veintiuno.

Jughead abrió los ojos cautelosamente y cuando estuvo totalmente despierto fue cuando los recuerdos de la noche anterior lo invadieron. Aquello lo llevó a cerrar los ojos fuertemente como si borrara cada recuerdo de todo lo que se había ocasionado. Se sintió apenado, ni siquiera quería salir de aquella habitación.

Estuvo ahí un largo tiempo pensando y analizando todo lo que haría, mordió su labio inferior. Aquello sería difícil.
En cuanto se duchó y se puso ropa limpia que él mismo había traído, estuvo listo para salir, por suerte el raspón que tenía en su pómulo había sanado más de lo esperado, no había ningún tono morado cómo él imaginaba, solo había un leve tono rojo.

Bajó lentamente las escaleras hasta llegar a la planta principal, donde todo estaba silencioso. Caminó hasta la sala donde tampoco se encontraba nadie, así que decidió ir al comedor con la ilusión de encontrar a Betty ahí, pero  justo cuando se giraba en dirección al pasillo, escuchó una puerta abrirse llamando su atención. Era Betty quién salía de su oficina. Sus miradas se encontraron en ese momento, y Jughead se sintió nervioso nuevamente.

—Creí que ya te habías marchado.—Murmuró ella dándole una última mirada a la pantalla de su celular.—

—No… —Jughead respiró hondo y continuó. —Quisiera hablar contigo.

Betty lo miró nuevamente cruzándose de brazos.—Te escucho.

Jughead respiró hondo.— Comenzaré disculpándome, perdí la cabeza, nunca fue mi intención hacerte sentir mal yo…

—Disculpas aceptadas.  —Respondió ella caminando al pasillo que daba al comedor, Jughead la vio marcharse y caminó tras de ella.—

—¿Puedes escucharme? —Pidió Jughead, Betty se detuvo  y giró para mirarlo fijamente.—

—Honestamente Jughead ¿Por qué lo haría? Cualquier cosa que digas y hagas no cambiará la forma en la que te portaste ayer.

Jughead rió incrédulo y negó con la cabeza. —Yo no podía quedarme con los brazos cruzados después de lo que él se atrevió a decirme.

—¿Qué es lo que te dijo? Debió ser muy grave para hacerte perder la cabeza.

Jughead se quedó callado ante la pregunta, en realidad no sabía cómo decírselo, no quería que se sintiera ofendida.

—No creo que quieras escucharlo.

—Bueno, te lo he preguntado, si quieres hablar de esto tienes que decirme todo.

—Esta bien. —Jughead apartó la mirada y continuo.—El dijo algo sobre haber tenido una noche contigo, ya sabes… —Murmuró incómodo.— y luego sobre tocarse pensando en ti. —Al final Jughead miró a Betty encontrándose con su expresión facial, ella no parecía molesta, ofendida, ni mucho menos incómoda. Hubo un silencio y luego Betty rió.—

—¿Con Joe? —Jughead la miró sin comprender. — No es necesario que intentes defenderme de fracasados como él. —Explicó.— Entiendo tu enojo y si, tal vez yo haría eso, sin embargo no me portaria tan inmadura contigo después.

—Esta bien, reconozco que eso fue un gran error.

—¡Ah, lo reconoces! —Exclamó Betty sin gracia.— Joe es un idiota y no, nunca tuve un encuentro sexual como él lo presume. —Betty volvió a reír. —Jughead. —Lo llamó cuando él bajó la mirada.— Puedo vivir con eso, hay tantos hombres hablando mierdas sobre mí, hombres que ni siquiera son conocidos. Pero hay un punto, un pino en el que es gracioso; porque puedo imaginar lo miserables que son sus vidas. Es aqueroso, si. Sin embargo he podido sobrellevar esto y nada que tenga que ver con ello me afecta, porque no les debo nada..