CAPÍTULO 29

4.7K 488 87
                                    






A la mañana siguiente fue la luz del sol que despertó a Nayoung. Al inicio no sabía dónde estaba y porque todo era tan distinto. Fue hasta que su cabeza recordó que no era su casa, sino la de Sunghoon, más específico, su sala.

No fue la noche más cómoda, obviamente un sillón no se podía comparar a su propia cama. Nayoung se sentó mientras restregaba sus ojos y estiró su cuello que se encontraba entumecido. Luego de esto se levantó y acomodó su uniforme con el que había dormido, fue al baño y se lavó el rostro.

Fue una corta rutina de mañana, no había hecho ni la midas de lo que solía hacer en su propio hogar, pero por lo menos se veía medianamente presentable. Finalmente pasó a la cocina donde se encontró con la madre de Sunghoon.

—Buenos días. —Nayoung saludó y tomó por sorpresa a la mujer—. ¿Necesita ayuda con algo?

—No te preocupes cariño. Solo siéntate. —La mujer dijo mientras seguía moviéndose en la cocina. Fueron cortos segundos hasta que la madre de Sunghoon se dio cuenta que quizás si necesitaba ayuda—. Ahora que lo pienso ¿puedes ayudarme moviendo aquí así no se pega o se quema?

—Si claro, no se preocupe. —Nayoung dijo y pasó frente al fuego donde comenzó a mover lo que se encontraba en la olla.

—Gracias por haber ayudado a Minyoung, si Sunghoon hubiera estado solo a lo mejor se desmayaba el primero antes que su hermana.

Ambas rieron desde la experiencia de haber crecido. A Nayoung le faltaba mucho para conocer la vida, pero sin lugar a dudas ya tenía sabiduría de ciertas cosas que pasaban en el largo viaje.

—Fue un gusto, siempre quise un hermano o hermana menor y haber podido ayudar me hizo sentir eso por primera vez. —Sonrió.

— ¿No tienes hermanos? —La mayor preguntó y Nayoung solo negó con su cabeza—. ¿Tu madre decidió no tener más hijos?

—Mamá tuvo problemas con su fertilidad, fui la única que no murió —las comisuras de sus labios subieron, pero no le quitaba lo melancólico que se podía ver en sus ojos—. Siempre me imagine lo que sería tener un hermano, supongo que tendré que seguir pensando e imaginando.

—Lamento escuchar eso, estoy segura que Hyunsook estaría muy feliz de saber que tiene una hija tan amable como tu. —Se quedaron unos momentos en silencio. Hasta que una alarma sonó—. Bueno, el desayuno está listo. Iré a llamar a los chicos ¿de acuerdo? Puedes ir sentando.

Nayoung organizó la mesa y se sentó en la misma silla donde se había sentado la noche anterior. Nunca dejaba su teléfono, era como si fuera un compañero de vida. Estaba revisando nuevos mensajes —que no tenía por cierto— así que cerró la aplicación y pasó a entrar a otra, y así sucesivamente.

— ¿Alguna vez hacés algo más que solo ver tu télefono? —La voz de Sunghoon se escuchó. Nayoung volteó para encontrarse con un Sunghoon despeinado con su cara hinchada de dormir tanto.

Fue... tierno.

—Buenos días para ti también Park Sunghoon. —Nayoung dijo bajando su teléfono y rodando sus ojos divertidamente a Sunghoon—. ¿Qué eres ahora? ¿Mi mamá?

Segundos pasaron y empezaron a desayunar. Fue silencioso, pero cómodo. Nayoung nunca imaginó desayunar en la casa de un extraño, de alguien a quien despreciaba tanto, o quizás no. Sunghoon y ella de algún modo se unieron, quizás fue la charla que tuvo con Heeseung, o la noche donde hablaron. Nayoung no diría que eran mejores amigos, ni siquiera amigos podrían llamarse. A lo mejor solo eran buenos compañeros. De todas formas no había la necesidad de ser mejores amigos ¿no es así?

Terminaron de desayunar al poco tiempo. El silencioso ambiente fue roto por la voz de la madre de Sunghoon.

—Sunghoon, ve a alistarte para llevar a Nayoung a casa ¿si? —Sunghoon asintió y luego se fue. La mujer sonrió mientras esperaba a que su hijo saliera de su vista y volteó a Nayoung—. Y cuentame Nayoung ¿son novios?

— ¿Qué? —Los ojos de Nayoung se abrieron de repente, como si fueran a salir de órbita—. No, no, no. Solo somos compañeros de trabajo.

Compañeros de trabajo... Fue lo que Sunghoon alcanzó a escuchar. ¿Solo eso? ¿No eran por lo menos amigos? Él no entendía cómo dejaron de lanzarse miradas de odio y se habían comenzado a llevar bien, tampoco entendía porque sintió amargas las palabras de Nayoung. ¿Por qué esperaba él que dijeran que eran amigos por lo menos? ¿No habían dicho que iban a empezar de cero? ¿Por qué tenía esa esperanzas tan altas? Y sobre todo... ¿por qué se sentía tan molesto?

El viaje de regreso a casa de Nayoung fue todo menos lo esperado. Sunghoon estaba serio, más de lo que Nayoung se había acostumbrado en las últimas horas. Pero ella no preguntó. No pensaba hacerlo tampoco, solo fue extraño.

—Gracias. —Nayoung dijo mientras salía del auto—. Y lamento ser una molestia este fin de semana.

—No lamentes nada. —Sunghoon dijo sin rastro de emoción. Su voz sonaba igual de seca como el primer día.

—Nos vemos el lunes. —Nayoung se despidió. Sunghoon solo asintió y subió el vidrio de su ventana. ¿Por qué se sentía tan molesto? ¿Por qué quería ser parte de la vida de Nayoung? Ella era igual al resto, una chica. No era nadie más. Sunghoon no entendía porque su mente le daba tantas vueltas al asunto. Además, Nayoung ya tenía novio.

¡Hoy Sunoo cumple años! Creo que ya lo dije, pero s la primera vez que celebramos el cumpleaños de Nunu después del debut

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Hoy Sunoo cumple años! Creo que ya lo dije, pero s la primera vez que celebramos el cumpleaños de Nunu después del debut. Estoy tan feliz de poderlo ver cumplir años y estoy emocionada por todos los que vienen en un futuro.

¿Si alcanzaron a ver el live hoy? Se unió mucha gente, entre 1 o 2 millones de personas y Sunoo se veía tan feliz. Los chicos han subido fotos a Twitter. Me emociona ver cómo Enhypen crece cada vez más. Mándele muchos mensajes de amor a él y a los chicos.

𝟭𝟬𝟬 | SUNGHOON ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora