LINDO ARROGANTE

Capitulo 31

Soy una lunática. Pero ahora lo que más importa es salir de aquí, no sé qué le voy a decir. Debí irme tan pronto me di cuenta que no estaba, no mejor no debí venir de ninguna forma.

Sigue mirándome con el ceño fruncido, pero no me dice nada, trato de levantarme, pero olvido que estoy en vuelta y caigo como costal de papas al suelo, me golpee y muy fuerte, en la cabeza, esto dejara chichota del tamaño de una montaña. Ser tan torpe va conmigo, me sale natural y todo.

Sungmin se acerca y me ayuda a levantarme y me sienta en su cama, deseo salir corriendo pero envuelta así no puedo. Estoy lo suficientemente avergonzada como para alzar la cabeza y mirarlo.

Sungmin:-¿Qué haces aquí? -dice con sequedad, su tono de voz transmite indiferencia y desagrado creo.

-¿desde cuándo estas aquí? -espero que no haya visto cuando me revolcaba en su cama como loca.

Sungmin:-¿eso importa? Solo quiero que me digas que haces aquí -eso no me ayuda mucho, no sé hasta qué punto debo mentir si no me dice cuanto ha visto.

-nada -es lo único que se me ocurre y lo más estúpido también.

Sungmin:-no perecía que estuvieras haciendo nada buscando por todas partes -entonces si ha visto bastante. ¿Qué debo hacer? No sé cómo me he enrollado tan bien, aunque Sungmin no hubiera llegado ¿Cómo habría podido salir de aquí? No me puedo desenvolver yo misma.

-¿me puedes ayudar? -que cascara en pedirle algo así después de lo que ha visto, pero es la única persona que puede ayudarme. No responde solo toma un profundo suspiro, se queda en el mismo lugar de pie luciendo tan sexy como es de costumbre.

Sungmin:-sino me dices que buscabas no te ayudo -dice después de un largo e incomodo silencio.

-yo solo.... -creo que mejor decir la verdad, además no puedo estar más avergonzada -te estaba buscando -se acerca un poco muy cerca, con la manos aun en sus bolsillos, ok aun no piensa ayudarme.

Sungmin:-¿Por qué quería saber si estaba en casa? -no lo sé, de verdad no sé porque he venido hasta aquí a buscarlo.

-no lo sé -no es uno respuesta muy segura, pero es la verdad.

Sungmin:-bueno si no piensas decirme puedes irte -dice estirando la mano hacia la puerta, yo no estoy para bromas ahora mismo.

-no puedo moverme -digo en voz baja.

Sungmin:-Ese-es-tu-PROBLEMA -dice monosílabamente, vaya al menos ya volvió el Sungmin arrogante de siempre, aunque ese Sungmin no es bueno para mí en este momento.

-Sungmin... no me harías eso ¿verdad? -pregunto temiendo de su respuesta.

Sungmin:-trata de salir -dice acostándose tumbándose en su cama con las manos bajo su cabeza -yo por mi parte me divertiré viéndote -me quedo anonadada ¿Qué se supone que haga ahora? No me puede hacer eso. Si me levanto no pasara ni una milésima de segundo cuando ya estaré en el suelo. Solo me queda irme arrastrando hasta mi habitación. Eso no me agrada.

Lo miro y le doy una mirada de suplica. Son tan patéticas. Pero el solo se ríe de mi desgracia. Si no estuviera inmovilizada ya le habría dado una patada por el trasero.

Trato de levantarme y me sorprendo cuando logro ponerme de pie, pero de inmediato me tambaleo y caigo acostada en la cama junto a Sungmin, no exactamente a su lado, sino mas bien caigo en su estomago, me dolió su estomago es más duro de lo que pensaba.

Sungmin:-Ah!!! ¿Eres tonta o qué?-se queja, trato de sentarme pero solo logro quitar mi cabeza de su estomago y ponerme a su lado.

-es tu culpa, si me hubieras ayudado, ya me habría ido -suspira pero no dice nada.