¿Aliados o rivales? ¿Amigos o enemigos? ¿Amantes o desconocidos?
Tate Brooks, una chica que se ha dedicado a ser fuerte, ruda e indomable, cree que el amor es un sentimiento vacío y sin ningún significado, pero todo eso puede cambiar cuando la vida...
La infancia es la etapa más inocente que viviremos en toda nuestra vida. Cuando somos niños creemos que no existe la maldad, las diferencias, las mentiras, las traiciones, ni nada que pueda crear alguna separación entre dos personas que se quieren con toda el alma. Pensamos que el cariño y la amistad son las fuerzas más poderosas del mundo, pero sólo son espejismos de la realidad. Es tan tierno e irónico que nazcamos sin ninguna pizca de maldad ni resentimiento en nuestro corazón, que es tan sorprendente el momento en el que todo eso cambia en un abrir y cerrar de ojos. Para Novak y Tate todo parecía fácil, ellos eran felices en su vida y no necesitaban de nada ni de nadie más, simplemente eran ellos contra el mundo. Estaban predestinados a convertirse en los mejores amigos sin siquiera tener opción. Las Calaveras y Los Escorpiones no siempre fueron enemigos a muerte, hubo un tiempo en el que ambas familias formaron una. Los Brooks y los Keller solían ser grandes amigos, una familia que lo compartía todo y básicamente vivían uno al lado del otro, pero esta unión no empezó con Aarón y Arthur, sino con sus padres.
Pasaron muchos años y las dos familias se llevaron de maravilla, hasta el punto en el que los dos matrimonios más jóvenes de cada pandilla recibieron la gran noticia de que serían padres. Fue a partir desde ese momento que los caminos de Novak y Tate se unirían para siempre.
- Vamos Tate, apresúrate- dijo Novak entre risas.
- Ya voy, espérame- contestó ella, tratando de seguirle el paso.
Ambos niños corrían a gran velocidad por todo el largo camino empedrado que los llevaba hasta un bellísimo parque. Este era su lugar favorito y su mayor escondite, venían al parque casi todos los días después de la escuela, pasando incontables horas jugando y platicando sobre todas las cosas que les había sucedido. Para Novak y Tate, esos eran los momentos más valiosos de sus vidas, el poder compartir cada segundo con tu mejor amigo sin preocuparse por los deberes ni obligaciones.
- ¿Ya estamos cerca Novak? Es que estoy algo cansada- hace Tate un pequeño puchero.
- Tranquila niña bonita, estamos muy cerca de nuestro lugar- dijo Novak antes de tomar la pequeña y delicada mano de Tate.
Cada vez que visitaban su tan preciado lugar, era como vivir una nueva aventura llena de magia. Ellos hacían que un viejo y enorme sauce se convirtiera en la pieza fundamental para la creación de su nueva historia. Jugaban desde la princesa y su príncipe azul, hasta los temibles ladrones que robaban dinero para dárselo a los pobres. Cada momento entre ellos era fascinante, la descripción perfecta de la amistad verdadera, llena de cariño, apoyo, risas y alegría.
- ¿Lista para nuestra nueva aventura?- preguntó emocionado.
- ¡Sí!
- ¿Puedo volver a ser tu príncipe?
- Novak, tú ya eres mi único príncipe.
Ambos se regalaron una dulce sonrisa y se acercaron para darse un cálido abrazo.
- Entonces, mi deber será salvar a mi princesa de un maligno dragón rojo con enormes alas y cuernos que te mantiene encerrada en tu castillo.
- ¿Y dónde estará?
- Justo aquí- respondió antes de llevarla más cerca del sauce.
Novak ayudó a Tate a subir y sentarse cuidadosamente en una de las gruesas ramas del árbol para que pudieran empezar su juego.
Los niños no tardaron mucho en imaginarse todo un escenario fantasioso, donde él estaba luchando a muerte con un gigantesco dragón, mientras que ella esperaba preocupada en su torre. Novak corrió y saltó de aquí y allá, fingiendo combatir a la bestia hasta que finalmente logró matarla, y sin más demora, volvió a escalar el tronco victorioso para poder llegar hasta su dulce princesa a la cual le dio un beso en la mejilla como muestra de amor.
- Yo te cuidaré y protegeré siempre niña bonita- dijo poniendo en frente si meñique izquierdo.
- Y tú siempre serás mi único príncipe azul Novak- agregó ella uniendo su meñique al de él para sellar su pacto.
Quien hubiera pensado que esa sería su última aventura juntos antes de verse afectados por un gran secreto que envolvió a sus familias en una nube negra llena de odio que terminó por separarlos y rompiendo esa promesa.
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