Detrás de ella [Lando Norris] ✓

Capítulo 46.

Lo veo dormido a mi lado y mi corazón duele mientras sonríe en algún sueño que debe estar teniendo, veo sus manos y la ausencia del anillo que yo le dí, miro su muñeca y suspiro al encontrarme con la presencia de la pulsera roja que le regalé cuando consiguió su podio en Rusia.

Vuelvo a mirar su rostro y sin limitarme más paso mis dedos por sus rasgos, por sus mejillas, sus pómulos, sus labios, su nariz. No estoy tan loca, él es real, él está aquí conmigo, sino no lo estaría tocando como ahora.

-Te extrañé tanto que parece irreal-Murmuro teniéndolo de frente y pasando mis dedos sobre sus labios.

Sonrío de forma leve porque eso es algo que él solía decirme cada vez que volvía de algún viaje, me lo decía mientras yo estaba en sus brazos y con sus labios cerca de los míos. Me lo decía cada vez que me veía haciendo que mi corazón estallara de alegría, porque ambos éramos eso.

-Yo también te extrañé-Habla por lo bajo tras unos segundos.

Veo como abre los ojos de a poco y tras unos segundos se pone bien de lado para quedar frente a mi.

-Pensé que dormías...

-Dormí la primera hora, luego sentí tu mirada en mí y me fue imposible...

Asiento con la cabeza y ambos nos miramos en silencio. Se ve que se cortó el cabello y eso es un gran cambio, pero en lo personal es más notorio el cambio en su mirada, realmente es la más triste que alguna vez ví en él.

-Estás distinta-Murmura dejándome ver que está viendo lo mismo en mi.

-¿Físicamente?

Él acomoda mi cabello.

-No te pienso negar que eres la rubia más linda que alguna vez ví-Sonríe de forma cálida-. Aunque me refiero más a...

Asiento al entender de lo que quiere hablar.

-Ya oíste al médico-Le respondo por lo bajo-. Además de mi ansiedad, pérdida de peso y anemia, tengo psicosis depresiva, soy un caso digno de investigación, ¿Te diste cuenta?

Hace una mueca y niega con la cabeza.

-Déjame que yo me encargue de tus psicólogos, déjame por favor, ¿sí?

No tengo fuerza para discutir y mucho menos con él, por lo que simplemente asiento con la cabeza en acuerdo, recibiendo una mini sonrisa en respuesta de su parte.

-Tampoco quiero que vuelvas a la casa con tus padres...-Murmura tímido tras unos segundos mientras enreda mi cabello en uno de sus dedos.

-No se que otra cosa hacer, ellos son supuestamente quienes...

Tensa la mandíbula y me mira de forma seria, es tal lo que transmite que no puedo terminar de hablar.

-No-Gruñe sentándose en la cama y mirándome desde ahí-, por un demonio que no te casarás, ¿Me oyes?

Lo tomo de la mano, lo hago acostarse nuevamente a mi lado y posiciono mis dedos sobre sus labios para que guarde silencio.

-No me casaré-Le aseguro mirándolo a los ojos-. No seré tan masoquista como para hacer algo así, mira a lo que me llevó....-Le digo señalandome a mi misma-, solo veré como puedo ayudar a Liam. Es que, no sé, mi abuela... Ella no necesita que yo haga algo así y yo tampoco lo quiero hacer.

Él asiente con la cabeza un poco más seguro y nuevamente ambos guardamos silencio por algunos minutos. Se que no pasaron muchos días, pero tenerlo nuevamente a mi lado es único.

-¿Qué haces aquí exactamente, Lan?-No puedo evitar preguntar.

Él sonríe solo con los labios y se encoge de hombros.