Capítulo 48 • Parte I.

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22 de Diciembre, 2021.
Miami, Estados Unidos.

No tengo ganas de nada, solo quiero llorar en la cama hasta que esto deje de doler.

-Salem, arriba...-Escucho a mi lado.

Abro apenas los ojos para verlo en cuclillas en el suelo a mi lado, no le contesto, cierro mis ojos y me doy la vuelta para abrazarme a la almohada que él usó anoche, las lágrimas se me escapan y un pequeño espasmo indicándonos a ambos que empecé a llorar nuevamente como una bebé.

-Vamos, linda...

-No puedo, Lando, me duele-Murmuro abrazándome con más fuerza a la almohada.

Siento su caricia en mi cabello y luego como la cama se hunde a mi lado. Abro los ojos y lo veo a mi lado, me saca la almohada con cuidado y me toma de la mano para ayudarme a acostarme encima suyo, los latidos de su corazón y sus manos en mi cintura son lo único que necesito en este momento. Me aferro a él, me aferro a que él me cuida y a que no estoy sola, no aún...

-La extraño mucho-Murmuro.

Siento como mis lágrimas caen sin control y en cuanto levanto mi rostro para mirarlo veo como él ya lo hace, con cuidado pasa su mano por mi mejilla y me acaricia.

-Siento tanto que estés pasando por esto, mi amor-Murmura.

Ambos contenemos el aliento en cuanto me dice "mi amor", en lo personal debo contenerme para empezar a llorar del alivio al escuchar eso. Sigo siendo su amor. Lo miro a los ojos y él se encoge de hombros.

-Sigues siendo mi amor, Salem... ¿A quién quiero engañar al decir que te podré superar?

Mis lágrimas siguen cayendo y él hace una mueca mientras las intenta secar a todas.

-¿Nos dolerá para siempre esto?

-Espero que no...

Cierro los ojos y vuelvo a apoyar mi frente en su boca. El simple roce y la presión de sus labios en esa zona me hace suspirar.

-Te extrañé muchísimo-Le digo sin separarme de su toque.

-Te extrañé tanto que parece irreal-Murmura acariciando mi cuerpo.

°°°

Miro el cofre con las cenizas de mi mamá y el lugar en la playa que solía ser su favorito, aquí debe descansar ella.

-Gracias por enseñarnos todo, mamá-Murmura en un hilo de voz mi hermana acariciando el objeto de madera.

Muerdo mi lengua intentando no llorar con desesperación y me apoyo contra el cuerpo de Lando que me sostiene como si su vida dependiera de eso. La pura realidad es que me estoy aferrando a él, lo necesito y mi ex novio no duda en acompañarme.

-Estoy orgullosa de ti, mami-Digo yo en cuanto el cofre está en mis manos-. Lo siento por todo lo que hice mal... Ya puedes descansar en paz.

Antes de morir ella nos pidió que tiremos sus cenizas en el mar, que es donde ella tiró las de mi abuelo. Y viendo el mar es cuando entiendo que ella está con él, que tras tantos años están juntos.

Tras unos segundos le paso el cofre a mi hermana, ella suspira y, con ayuda de su prometido, tira todo el contenido en el agua. Pasan algunos segundos y, tan loco como suena, de golpe empieza a llover, digo de golpe porque todo el día estuvo gris y apenas las cenizas de mi mamá tocaron el agua... Quiero creer que es una señal de ella, un "estoy bien" y por eso me quedo con esa sensación.

-Nosotros nos iremos-Murmura mi hermana mirándome-. ¿Vienen?

Miro a mi lado a Lando, la lluvia hace que su cabello se caiga sobre su frente y niego con la cabeza.

Detrás de ella [Lando Norris] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora