Me veo en el espejo de cuerpo completo de mi habitación.
Ladeo la cabeza he intento bajar un poco más mi vestido blanco pero es imposible.
-Adelante-digo cuando tocan mi puerta y me arreglo mi cabello chino.
Tayler entra arreglando su camisa blanca.
Al verme sonríe y se acerca al espejo.
-Estás muy guapa-dice con una sonrisa y yo me miro en el espejo haciendo una mueca.
-¿No está un poco corto?-señalo la tela que cubre mis piernas y él rueda los ojos.
-Está cuatro dedos arriba de la rodilla Izi-dice mirándose en el espejo.
-Vale-digo y me siento en la cama poniéndome unos flats color crema, olvídense de que use tacones.
Me levanto y voy hacia él que se sigue inspeccionando en el espejo.
Lo abrazo y beso su mejilla.
-El espejo se va a romper-bromeo haciéndolo reír.
-Por tu culpa-dice ahora haciéndome reír a mí.
Nos miró en el espejo y me siento demasiado feliz.
Veo mi vestido anudado a la parte de atrás del cuello, me aprieta hasta la cintura y cae muy sutilmente hasta por encima de las rodillas.
Traigo el pelo suelto y un maquillaje muy natural.
-¿Nos vamos?-pregunto viendo mi reloj.
Nueve cuarenta y tres de la noche.
-Sí, Jeremy nos ha de estar esperando-dice y yo asiento.
Él sale primero y yo me pongo perfume y tomo mi bolso pequeño al que le entra únicamente lo esencial.
Salgo y en el recibidor tomo mi abrigo y ayudo a acomodar el cuello de la camisa de Tayler y los dos salimos hacia su auto.
Un precioso Audi en color negro.
Las calles a esta hora de la noche están bastante llenas.
Pongo la radio y muevo la cabeza al ritmo de la música.
-¿Segura que estas bien? Podemos posponerlo-dice Tayler mirándome de reojo.
-Justo por esto es que no te iba a decir nada-gruño y él me mira mal.
-Solo me preocupo, te golpeo un auto Liza-dice y pone las luces de que va a la derecha.
-Estoy bien, solo me roso-repito y él asiente.
-Cualquier cosa, podemos regresar cuando quieras-murmura y yo beso su mejilla.
-Eres todo un amor-digo viendo la calle.
-Lo soy-afirma y yo rio.
-No puedo creer que hayas dejado a aquel guapo doctor en plena calle-se ríe y yo me pongo colorada.
-Se lo merecía-me encojo de hombros pero por dentro los nervios me carcomen.
No quiero que llegue el domingo.
No quiero verlo, no podría.
Maneja con tranquilidad y yo veo por la ventana pensando en aquel demonio de ojos grises.
Agito mi cabeza evitándolo en mis pensamientos pero parece estar bien ahí.
Parece estar bien atormentándome.
-Llegamos-dice Tayler y veo al frente una puerta con luces neón y un cadenero.
Me bajo y caminamos hacia el lugar, la música se escucha hasta acá.
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ENTRE SANGRE Y TINTA (TERMINADA) √
Fiksi Remaja-¿Qué...que quiere hablar conmigo? Se gira hacia mí mirándome con intensidad, una intensidad que me asusta porque parece mala, parece odio. -No quiero que sigas huyendo de mí. Jamás me había sentido tan pequeña al lado de alguien. -No quiero que sal...