CAPÍTULO 43

5K 315 140
                                    

Llegue a casa y escucho trastes en la cocina.

Sonrió con fuerza y dejo mis cosas con cuidado de no hacer ruido y me acerco.

Lo veo bailando con la música que tiene desde su celular.

-¡Hola!-grito cuando salto a su lado.

-¡Dios santo!-Tayler salta y la cuchara sale disparada de su mano.

Me rio con fuerza y él pone una mano sobre su corazón intentando calmarse.

-Eres un maldito peligro Izi-me fulmina con la mirada y yo me rio con fuerza.

Me acerco y lo abrazo.

-¿Me perdonas?-hago puchero y él niega me quita con cuidado.

-Solo lo dices para que no te asuste, pero todo tiene consecuencias-dice y recoge la cuchara y la pone a lavar.

Yo hago puchero y me cruzo de brazos.

Lo ignora y toma otra cuchara y revuelve una especie de salsa.

Me acerco y veo sobre su hombro.

Es una salsa roja y la boca se me hace agua.

-Huele delicioso-le digo y él me sonríe y abre otra olla y me siento salivar.

-Pasta-murmuro y él asiente riendo.

-Pensé que podíamos cenar juntos, hace mucho que no lo hacemos-dice y una parte de mí se siente culpable.

Asiento y él empieza a servir en dos platos la pasta ya con la salsa y le pone queso fresco encima y hojas de albaca.

Me siento en mi banco y él pone los platos y luego me pone un vaso con agua que agradezco con una sonrisa y él se sirve vino.

-Probé un vino con Vosk-le digo y él me mira sorprendido.

-¿Lo hiciste?-pregunta mientras se sienta a mi lado, asiento y tomo el tenedor.

-Me gusto, de hecho, no era un vino como tal pero tenía muy poco alcohol-digo y él asiente.

-Lo entiendo-asiente y toma de su copa.

-¿Cómo van las cosas?-pregunta y enrolla su pasta con el tenedor.

-Va bien, hoy tuvimos una pequeña pelea pero lo solucionamos-le digo y él alza las cejas repetidamente y yo golpeo su hombro pero no niego nada.

-Ya decía que esa sonrisa no era por besos nada más en tu boca-dice y yo abro la boca y siento mis mejillas ponerse rojas.

-¡Tayler!-él levanta las manos con una sonrisa divertida.

-¿Y qué tal las cosas en el restaurante?-pregunto y como de la pasta, el sabor del tomate y las especias me hace salivar aún más, es delicioso.

-De hecho, tengo noticias-dice llamando mi atención.

Me giro completamente hacia él esperando que continúe con ansia.

Lo aliento con un ademan de mis manos a que continúe.

-Voy a abrir uno en Dalas-suelta y yo abro la boca con sorpresa y empiezo a sonreír y a brincar en mi taburete.

-¿¡Qué!?-sonrío como una loca y tomo sus hombros con mis manos.

Tayler sonríe y asiente.

-Me hicieron una propuesta que no pude negar, el restaurante es mío, la mayoría y un socio estará allá, empezamos la búsqueda de terreno la próxima semana, pero ya tenemos unos en mente-dice y siento que exploto de la emoción y los ojos se me llenan de lágrimas.

ENTRE SANGRE Y TINTA (TERMINADA) √Donde viven las historias. Descúbrelo ahora