| Fire & Love | [1]

C I N C U E N T A Y O C H O

Olivia se encontraba reposando en casa junto a Spike, que había sido cuidado por Mack y traído por Happy luego de la pelea. El labrador estaba desanimado porque no había visto a su otro dueño y porque sentía que su dueña estaba preocupada y triste. Por lo que no se apartó de ella, hasta que esta hiciera o dijera algo; y es que luego de su conversación con Natasha llegó la doctora Cho, quien la había revisado y le había dicho que su bebé era fuerte, pero que tendría que tener cuidado la próxima vez para que no lo perdiera.

Después de eso, Happy firmó para que le dieran de alta y Pepper se ha quedado con ella por petición de Tony quien había decidido ir a donde tenían a sus ex-compañeros de trabajo luego de que le llegara una información sobre el caso de Barnes. 

—Traje esto, Liv, no has comido nada desde que salimos del hospital y eso es muy preocupante.

—No tengo hambre, Pepp.

—Ya, pero tu bebé lo necesita.

Olivia a regañadientes comió lo que le había traído, y suspira pensando en su esposo. — ¿Crees que está bien? Alguien debió acompañarlo.

—Nada más están tú y Visión. Rhodey está hospitalizado todavía.

—Debería estar con él.

—Pero no puedes, así que quédate aquí hasta que él regrese.

— ¿Para dónde vas? —pregunta al ver que se ponía de pie, Olivia no quería estar sola porque sabía que sus pensamientos la perturbarían hasta que viera a Tony a su lado.

—A la empresa. Lo que sucedió ha revolucionado todo y como directora y amiga de Tony debo apoyarlo ahí.

La castaña suspira y asiente. —De acuerdo. Me llamas si necesitas ayuda en algo, lo que sea.

Pepper ríe sabiendo porque actuaba así su amiga, por lo que de su bolso saca unos hilos con unas agujas. —Para que entretengas tu mente, ya que al parecer Joey, Chandler y Ross no te despejaran esos pensamientos.

Olivia rueda los ojos, recibiendo los objetos. —A veces quisiera odiarte, Potts.

—Pero no podrás nunca, amor.

—Cuídate.

—Tú igual. Quiero que mi sobrino esté sano y fuerte, ¿de acuerdo?

Después de eso, volvió a quedarse sola y se dio cuenta de cuanto necesitaba a Tony en su vida. Suspira acariciando al labrador. — ¿También extrañas a papá? —el perro gimotea colocando la cabeza en las piernas de su dueña. —Lo sé, Spike, siempre hará falta papá.

°°°

Estaba durmiendo cuando en su mente llegan varias voces diciéndole: "despierta". Abre los ojos abruptamente y frunce el ceño colocándose de pie cuando escucha varias cosas caer en alguna parte de la mansión. 

"Tony" "No está bien" esa información la alteran y decide ir averiguar donde estaba su esposo. Cada vez que se acercaba al taller, los pensamientos y emociones de Tony cada vez se hacían más fuertes junto a los destrozos que posiblemente estaba haciendo. Lentamente entra al taller y lo que ve, le rompe el corazón en mil pedazos.