"Entonces déjame estar contigo" Bakugo y Tsuyu

"DÉJAME ABRAZARTE"

Sábado 7 de la tarde, Bakugo se vistió con lo primero y más decente que encontró de su armario, una camiseta de mangas largas color negro y unos jeans claros, los acompañó con un calzado cómodo y con la mirada perdida frente al espejo suspiró, "Se lo diré hoy", pensó el rubio.

Bajó a despedirse de sus padres quienes ya sabían a dónde iría, salió de su casa y tras caminar unas cuantas cuadras se encontró a una mujer bajita que le saludaba desde un automóvil amarillo.

-¡Katsuki chan! ¿Ya estás listo? -Sonrió de manera tranquila.

-Sí, ya vámonos...  ¿De dónde sacaste el auto?

-Un amigo me lo prestó, tiene decenas de autos porque es un héroe profesional y esas cosas, por eso no le molestó prestármelo.

-Umh, un amigo que es un héroe...

-¿Qué pasa?

-Debe ser genial tener todo ese dinero, ¿No? Es decir, puedes comprar lo que quieras... A quien quieras.

-Supongo, pero cuando te gradúes de UA tendrás mucho dinero, estoy segura. -Tsuyu decía subiendo al auto y poniéndose en marcha.

-¡Tsk, claro que sí! Hasta podré comprarte lo que quiera. -Se encogió en brazos.

-Claro, claro, entonces cómprame un auto, jajaja.

-¡¿Crees que no puedo?! ¡Lo voy a hacer!

-Genial, voy a tener un auto jajajaja.

Media hora más y estaban por llegar a al lugar, varios puestos que posiblemente comenzarían a laborar más tarde comenzaban a verse y de fondo a todo unas largas escaleras que se dirigían a la punta de la colina.

-Vaya, en mis tiempos no estaba así, tuvimos que escalar para llegar hasta ahí y ¡Mira! Hasta hay posadas, nosotros tuvimos que dormir en una casa de campaña esa noche.

-Lo dices como si hubieran pasado años, tsk.

-Lo fueron, 9 años para ser precisos.

-¿Y eso qué? -Supongo que te ves igual que antes.- Bakugo se apenó un poco.

-No lo creo, me estoy haciendo vieja, jaja; bueno vayamos a una de esas posadas, ojalá tengan habitaciones libres.

-Si sólo hay una te quedas con esa, yo dormiré en el auto.

-¿Qué? Claro que no, vamos a quedarnos en la misma, ¿Cómo por qué te quedarías en el auto? Ven. -Tsuyu lo tomó del brazo.

-¡¿C-cómo?! ¡¿En la misma?!

-Sí, ¿Qué tiene de malo? En la secundaria te quedabas todo el tiempo en mi habitación.

-Pero eso fue hace mucho, ¿E-estás bien con eso?

-Por supuesto. ¿Señorita tiene libre una habitación? .-Preguntaba Tsuyu a la recepcionista de una de las posadas del lugar.

-Claro, tenemos libre la habitación 03. ¿Vienen por el festival de más tarde? . -Preguntó la recepcionista.

-Así es, aunque no sabía que también había un festival, vine aquí hace mucho y sólo vimos los fuegos artificiales.

-Tiene razón, ha cambiado bastante. Cómo sea, esperamos que lo disfruten usted y su hermano.

"¿Hermano?" Palabra de 7 letras que aturdió a Bakugo.

-¡No soy su hermano! Tsk.

-Oh, lo siento, ¿Eres su hijo?

-Jaja, ¿Tan vieja me veo? -Tsuyu reía.

-¡N-no! Y usted, ¡No ande suponiendo por ahí!

-Ya ya, no seas grosero, vámonos a la habitación, ¡Gracias señorita!