v e i n t i c i n c o

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Luchar.

Defenderme para estar en dónde estoy.

Eso había hecho todos esos días, después de mi llamada con Gulf podría admitir que mi estado de ánimo mejoro bastante, aunque aún tenía la lave impresión de que era vigilado.

No sabia por qué.

Pero parecía que siempre habían unos ojos en mi espalda, Han se convirtió en una amiga con la cual me la pasaba cuando tenía tiempo libre.

Hablábamos de cosas banales y compartíamos nuestros sueños.

—A pesar de que gané quién gané, quiero decirte que igual me gustaría mantener contacto contigo.—habló de pronto.

Estamos en la azotea de aquel edificio,  yo me fumaba un cigarro mientras tenía apoyados los brazos en aquel barandal.

La volteé a mirar con cariño, en tan poco tiempo se volvió mi confidente.

—Opino lo mismo, de igual manera te deseo las mejor de las suertes.—le dije dándole una leve sonrisa.

—A puesto a que tú novio debe estar dándote muchos ánimos.—rió exhalando el humo.

Tosi un poco ante la sorpresa de la palabra novio, era algo extraño, todavía, para mí.

—Ojalá, hemos hablado todos estos días, me da fuerzas y ánimos.—respondí sincero.

Gulf se lo tomó muy bien, a pesar de que no podia estar presente en su cumpleaños, luego de aquella conversación le resto importancia, dijo que era más importante que yo cumpliera mis sueños.

Cumpleaños habían muchos, estas oportunidades eran escasas.

Para ser sincero me alegraba que Gulf lo hubiese entendido y a pesar de eso me brindara tanto su apoyo.

—Se ven que se quieren mucho.—Finalizó tirando su cigarrillo.—¿Listo para mañana?

Mañana era el gran día.

—Eso creo.

Me metí en cigarro en la boca e inhale, quería que la nicotina me ahogara en placer, el humo luego salió por mi boca,mientras ella me miraba con nostalgia.

—Tengo nervios.—admiti.—Después de mucho tiempo estoy aquí, he conocido gente con mis mismos intereses, he tenido tutores geniales, me sentiría terrible si se sintieran defraudados de mí.

—No le debes nada a nadie.—Han me dijo mientras también apoyaba los brazos en el barandal.—Ganes o no,fue por tú propio mérito y esfuerzo, al único a quién vas a enorgullecer y en el peor de los casos defraudar es a ti mismo.

Me apretó el hombro.

De cierta manera tenía razón, si había llegado hasta ahí era por amor a mis sueños, a mis metas, no al de los demás.

—Gracias.—le dediqué una última mirada a ella, luego volví al horizonte, más bien a los muchos edificios.

Apagué el cigarrillo, charlamos un poco mientras poco a poco la noche nos envolvía en sus fríos brazos.

Apagué el cigarrillo, charlamos un poco mientras poco a poco la noche nos envolvía en sus fríos brazos

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【 𝑇𝑎𝑡𝑡𝑜 】↠ 𝑴𝒆𝒘𝒈𝒖𝒍𝒇 !¡♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora