Vuelo #56

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Shen Qingqiu no sabía que decir o hacer, hasta hacia poco había presenciado la magia de la vida haciendo de las suyas en su casa de bambú, cuando al autor idiota se le ocurrió tener dolores de parto y dar a luz ahí mismo.

Claro él no sabía nada de partos, Luo Binghe menos, ambos corrían de un lado al otro como pollos sin cabeza y los gritos adoloridos del otro no auguraban nada bueno.

Luego de mucho estrés, con algo de ayuda del miserable sistema lograron que el milagro de la vida se diera.

El pequeño Mo nació con un llanto estridente que solo hacían alusión a lo ruidoso de su "madre".

Para Mu QingFang esta era su primera vez viendo un parto de esta índole, por su experiencia simplemente aseguró que el bebé era sano aunque estuviera más frío al tacto que un bebé humano, pero tomando en cuenta su herencia demoníaca se podía decir que estaba dentro de los parámetros normales.

Mobei-Jun llegó como una ventisca helada a la casa de bambú, luego de enterarse de que el bebé se había adelantado.

Shang Qinghua luego del extenuante trabajo de parto parecía que solo quería dormir al igual que el bebé que se quedó dormido como si estuviera cansado.

Mobei-Jun simplemente se disculpó con Luo Binghe por las molestias causadas, nadie podía anticipar que el bebé se adelantara, no había estado muy convencido de dejar salir a Shang Qinghua en su estado.

Todo había resultado bien al menos.

El pequeño Mo había traído alegría al palacio de hielo, muchos demonios estaban contentos por el anuncio del heredero, otros no muy convencidos por tener a un mestizo gobernante, pero esto significaba que en efecto el heredero sería sumamente poderoso.

Desde aquel incidente Shen Qingqiu no había vuelto a ver a Shang Qinghua del cual solo sabía que estaba recluido en el palacio de hielo cuidando del bebé.

Luo Binghe se había mantenido curioso al respecto del embarazo de Shang Qinghua. Tanto así que había insistido mucho para que fueran a ver al bebé, Shen Qingqiu no pudo contra esos ojos de cachorro y terminó cediendo.

En el palacio de hielo la seguridad se había vuelto más estricta, podía ver más guardias de lo habitual. Mobei-jun los había recibido y parecía un tanto cansado, ¿eso que tenía bajo sus ojos eran bolsas?

Cuando vieron a Shang Qinghua este descansaba cómodamente en su cama con muchos cojines y cobijas, mientras sostenía al bebé jugando con pequeño sonajero.

- Hermano Pep... digo hermano Shen, mi señor, realmente no los esperaba por aquí.

- Binghe insistió, quería ver al bebé - dijo Shen Qingqiu.

- Todos quieren ver al pequeño Mo, mira tus tíos marciales han venido hoy a verte - dijo al pequeño que tenía un rostro tan inexpresivo como su padre.

Shang Qinghua le había dejado cargarlo, el pequeño Mo se sentía algo frío, miraba con esos ojos helados a aquellos visitantes, de inmediato no dudó en sostener un mechón del cabello de Shen Qingqiu y tirar de él.

- Bien hecho hijo mío, debes vengarte del hermano pepino - dijo en voz baja Shang Qinghua y Shen Qingqiu trataba de librarse del agarre del pequeño que pensó le arrancaría el cabello.

Luo Binghe realmente estaba fascinado con la imagen frente a él, realmente su Shizun podría verse así de hermoso sosteniendo a un pequeño bebé, un pequeño Binghe, la idea ya había calado hondo en su cabeza.

- Shizun, yo también quiero, yo también quiero cargarlo - dice emocionado, es su primera vez estando tan cerca de un ser tan pequeño, Shen Qingqiu trata de ser precavido y le dice como sostenerlo con cuidado.

Shen Qingqiu ve como Luo Binghe carga al pequeño Mo y comienza a hablar con Mobei-Jun sobre sus posibles estadísticas de combate.

- Su llanto puede quebrar el hielo más denso, algunos sirvientes han muerto atravesados por las estalactitas que se desprenden del techo. Aún no controla del todo su temperatura, si no se tiene cuidado podría congelar a alguien en cuestión de segundos, de hecho, hay muchas estatuas nuevas en el patio del palacio.

- ¡Vaya es realmente poderoso!

Shen Qingqiu solo mira un tanto extrañado a los demonios charlar y se acerca a donde está Shang Qinghua.

- ¿Estas bien?

- Si, solo que es un poco cansado, Mo-er es muy demandante como su padre, Mobei al menos se ocupa de el por las noches. Los bebés no son nada fáciles hermano pepino.

- Te quejas mucho.

- ¡Ah! no es a ti a quien le muerden los pezones, ¿Sabías que un bebé demonio nace con los colmillos bien afilados? claro por ser mitad humano no debería usarlos ya que se alimenta de la leche materna a veces hay que enfriarle la leche antes de dársela. Si no le cambias el pañal a tiempo podría congelar todo el palacio, tampoco le gusta el agua tibia así que debe bañarse con el agua más helada de un glaciar.

Shen Qingqiu no sabía si compadecerlo en este momento, pero le daba un sentido pésame al hermano avión.

- Deberían tener uno ustedes, no sabes la ilusión que me hace ver a un pequeño Binghe - dice Shang Qinghua lo suficientemente alto como para que Luo Binghe lo escuche.

Shen Qingqiu no sabe dónde esconder el rostro.

- ¡Shizun! ¿no sería maravilloso? - dice con el bebé en brazos y Shen Qingqiu solo quiere matar a Shang Qinghua.

- Binghe, tu Shang-Shishu está muy cansado, Mobei-Jun también, lo correcto debería ser que nos marchemos para volver en otro momento más apropiado, quizás cuando Mo-er sea lo suficientemente mayor como para reinar...

- ¡Shizun! - Luo Binghe no quiere despedirse, realmente quiere seguir jugando con Mo-er.

Shen Qingqiu realmente no se esperaba que Luo Binghe estuviera tan interesado en un bebé, en tener un hijo... Shen Qingqiu odia ser tan débil ante los ojos de cachorrito de Luo Binghe.

Como conquistar a un autor idiota y no morir en el procesoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora