Para ambos demonios aceptar que sus esposos tenían una "amistad" que iba más allá de lo convencional era un tanto difícil, más cuando escucharlos reír de una manera que no harían frente a alguien más les ponía celoso, la manera en que hablaban y se expresaban entre ellos usando palabras y bromas que solo ellos entendían como si tuvieran su propio lenguaje secreto les hacía pensar ¿en qué momento se habían hecho tan cercanos?
No lo entendían.
Se suponía que debían estar discutiendo asuntos importantes del reino demoníaco en lugar de espiar las conversaciones triviales de sus esposos, ya que poco o nada podían deducir de lo que hablaban: Internet, sistema, avión, pepino, etc. Eran palabras sin contexto y desconocidas para ellos.
La manera en que ambos se llamaban el uno al otro pensaban que podía ser algo irrespetuosa, pero eran nombres que aparte de ellos dos nadie más usaba para referirse a ellos mismos.
- ¡Avión! ¿Estás bien? - la voz escandalizada de Shen Qingqiu alarmó al par, escuchaban a Shen Qingqiu llamar al otro acompañado de unos sonidos ahogados.
Mobei-jun percibió el peligro y decidió dejar de lado que estaban técnicamente "espiando" a sus esposos y entró a la sala de té junto a Luo Binghe y entonces ambos se quedaron estáticos viendo la escena frente a sus ojos.
Shen Qingqiu ni los había mirado solo estaba enfocado en sostener a Shang Qinghua desde atrás y con sus brazos alrededor del otro presionaba sobre su pecho, mientras Shang Qinghua parecía estar luchando por respirar mientras tosía de manera desesperada, un par de empujones más y Shang Qinghua terminó por expulsar lo que estaba obstruyendo su garganta.
- Gracias hermano pepino, creí que moriría - dijo Shang Qinghua recobrando el aliento.
- ¿Quién te manda a comer tantas semillas de melón de golpe? Tienes suerte de que sepa primeros auxilios - dijo Shen Qingqiu dándole algo de agua.
Ambos señores del pico estaban tan absortos en su mundo que no se habían percatado de la presencia de los demonios a la distancia.
Shang Qinghua fue el primero en darse cuenta al sentir la baja temperatura.
- Mi rey... - dijo y Shen Qingqiu se volteó a mirar a Luo Binghe que estaba allí parado.
Lo que ocurrió después fue un terrible malentendido dónde desde el punto de vista de los demonios Shen Qingqiu había hecho algo un poco osado tocando a Shang Qinghua y presionandolo contra su cuerpo.
Para ambos demonios esta no parecía ser una situación de emergencia, sino todo lo contrario.
Ambos señores del pico ahora tenían que lidiar con sus esposos celosos, que creían que tenían algún tipo de relación secreta.
Ya para solucionar el malentendido, tuvieron que trabajar duro, usar sus armas de seducción y ofrecer sus traseros a sus esposos que hicieron uso de ellos de manera inclemente como si quisieran dejar en claro a quien pertenecían.
De ese pequeño incidente había pasado ya un mes.
Ahora por mera politiquería, y deberes con el reino demoníaco, ambos señores del pico acompañaban a sus esposos a una importante conferencia. Shen Qingqiu solo había aprovechado a venir para ver al idiota de Avión y así intercambiar chismes.
Casi se habían tenido que encontrar de manera secreta a orillas de un lago cerca del palacio que visitaban, lo cual era absurdo pero sus esposos habían estado muy recelosos a dejarlos solos desde aquel incidente.
- Mi rey realmente se ha puesto celoso, nunca pensé que vería esa faceta suya - dijo Shang Qinghua un tanto sorprendido pero feliz al respecto.
- No puede ser peor que Binghe.
- Mi hijo es muy celoso, pero te quiere mucho, es una pena que no soporte la idea de que hablemos a solas.
- Se le pasará, aunque no sé para cuándo.
- Cuando llegué pensé que me mataría - dijo Shang Qinghua recordándolo con un escalofrío.
- Mobei-jun también da miedo, pero estoy seguro de que si las miradas matarán yo ya estaría muerto otra vez - Shen Qingqiu abrió su abanico.
Ambos comenzaron a charlar tranquilamente esperando que sus esposos estuvieran distraídos entre los asuntos políticos de su mundo.
- Este lago me da algo de miedo, se ve profundo - dijo Shang Qinghua un tanto preocupado al pasearse cerca del borde.
- Solo es un lago normal, me sorprende que exista algo así en el mundo demoníaco.
- Mejor vamos a los jardines dicen que tienen flores exóticas - recomendó Shang Qinghua.
Shen Qingqiu solo le miró curioso.
- Es que no sé nadar - admitió Shang Qinghua y Shen Qingqiu alzó una ceja, la sonrisa en su rostro pasó desapercibida para Shang Qinghua gracias a su abanico.
Bien, Avión lo había metido en muchos problemas, el solo pensaba en una pequeña broma así que le empujó al lago y Shang Qinghua había tratado por todos los medios de no caer, pero fue inútil.
Shen Qingqiu esperaba que el autor algo enojado emergiera del agua, pero no pasaba nada, se comenzó a impacientar cuando dejaron de verse burbujas de aire en el agua, no esperaba que de ese lado del lago estuviera tan profundo, dejó a un lado su abanico y se quitó parte su túnica exterior entonces se lanzó al agua.
No tardó en sacar del lago a un Shang Qinghua que no parecía respirar para su mayor preocupación.
- ¡Estúpido Avión no te puedes morir por una broma absurda! - Shen Qingqiu trató de reanimarle, pero no pasaba nada, decidió que lo mejor era intentar insuflar algo de aire a sus pulmones.
Tomó el rostro de Shang Qinghua, con sus dedos presionó su nariz y abrió su boca y entonces unió sus labios a los del otro comenzando a darle aire y volviendo a darle compresiones en el pecho.
Tras un par de intentos fue exitoso, Shang Qinghua comenzó a toser agua y comenzó a respirar con normalidad.
- Hermano Pepino te dije que no sabía nadar - dijo con ojos llorosos.
- Lo siento, no esperaba que fuera tan profundo - Shen Qingqiu realmente estaba apenado con su comportamiento.
- Espero que me lo compenses, quiero un pastel, uno muy grande, ¡achú!
Shang Qinghua sintió algo de frío, pero luego sintió un grueso abrigo en sus hombros al igual que Shen Qingqiu.
- Shizun, eso que hemos visto... Shang-Shishu y Shizun se estaban besando... - dijo Luo Binghe con ojos llorosos.
- Binghe... Lo que viste, puede que parezca eso, pero solo estaba aplicándole primeros auxilios, si no lo ayudaba el moriría.
- S-si es cierto mi rey, mi señor, no estábamos haciendo nada para engañarlos, el hermano Shen está muy enamorado de mi señor y yo amo a mi rey.
Estos demonios tenían cara de que no se tragaban sus excusas.
Esa noche ambos señores del pico trabajaron más duro de lo usual para complacer a sus esposos, durante una semana ambos no pudieron levantarse de cama por el dolor en sus traseros.
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Como conquistar a un autor idiota y no morir en el proceso
Fiksi PenggemarSerie de Drabbles y Oneshots donde Mobei-Jun trata de conquistar a su tonto y despistado sirviente, hará lo que sea o morirá en el proceso. Tambien historias inconexas sobre momentos de su relación.