Vuelo #64

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Para todos los discípulos su llegada quizás había sido como un balde de agua fría, muchos aún se explicaban cómo había burlado la pena por sus crímenes, otros le miraban con cautela y desprecio. Quizás se lo merecía puesto que él no había hecho nada para ganarse su cariño y respeto, no había sido un buen shizun.

Shang Qinghua no insistió en ser recibido con calidez, simplemente ni él sabía cómo actuar en esta situación así que simplemente copió a sus padres.

A todos les gustaban los regalos ¿no?

Si bien no sabía cómo ganárselos podría apaciguar su ira con regalos costosos.

Se sorprendió de que todos lo aceptaran, aunque se sentía en el aire una falsa sensación de bienestar, percibe la tensión inicial, intenta ser amable y poner una sonrisa indicando que estaba de vuelta en el pico y se encargaría del trabajo atrasado.

Eso había sido tan incómodo. Hubiera sido preferible que Zhangmen-xiong le acompañara y ordenara con facilidad a los discípulos que recibieran a su maestro, pero él había decidido confrontarlos por su cuenta.

Se esperaba quejas y al menos algo de drama al respecto, pero su bienvenida fue tan fría como volver a casa después de la escuela.

Luego de terminar todas las misiones de la trama principal se sentía un poco más libre pero perdido también, ya que no fue un buen maestro, estaba tan ocupado pensando en no morir que simplemente no conectó en ningún momento con sus discípulos, él sabía que ellos eran NPCs así que ¿por qué perder el tiempo con ellos? Total, nunca le habían respetado antes de todos los demás incidentes.

Era realmente lamentable.

Ellos eran fríos con él y lo siguieron siendo, trató de sonreírles, pero con el pasar de los días también se fue cansando y su rostro recobró su expresión más neutra.

Eso no le impidió actuar con algo de enojo al ver que había tantas cosas mal organizadas o que faltaban registros.

Su discípulo principal fue víctima de sus quejas exigiendo una explicación al respecto. El discípulo simplemente de mala manera respondió: - Shizun nunca nos enseñó.

Bien, estaba acostumbrado a hacer el trabajo importante por su cuenta, en su ausencia nadie sabía como llevar esto a cabo, estaban acostumbrados a que su shizun lo terminara a su regreso que cuando no sabían si su Shizun iba a volver o no por todos los incidentes causados habían hecho el trabajo como mejor les parecía.

Shang Qinghua prefería la vida en el palacio, al menos allí estaba su rey, aquí simplemente estaba solo en su habitación polvorienta.

Quizás ya no debería quejarse tanto y hacer algo al respecto.

- Está bien, este shizun entonces les enseñará.

Revistiéndose en una gruesa capa de paciencia comenzó a explicar el procedimiento.

- Agradezco sus sabias palabras y el conocimiento compartido shizun, este discípulo se retira y hará llegar sus instrucciones a los demás.

Demasiado formal, que ni él había podido bromear al respecto.

- Solo está actuando, ni siquiera sintió culpa por la muerte de nuestros hermanos marciales.

- Les debe su lealtad a los demonios ¿Qué más pueden esperar de él?

- Se cree mucho porque el líder le ha perdonado la vida, si yo fuera el líder de secta habría cortado su cabeza.

- No digas cosas tan horribles en voz alta podrían oírte.

- Es que lo odio.

- Lo sé, pero nosotros no somos como él.

Escuchar a escondidas no era problema para él, era un espía después de todo. Aquello que había escuchado era lo que se esperaba, no le sorprendió en nada.

Como conquistar a un autor idiota y no morir en el procesoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora