Capítulo 23. Primeras señales.

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Matthew estaba totalmente asombrado por la confesión que su hermano mayor le compartió de desprevenidamente, porque él no lo esperaba, y mucho menos el tono seguro en su voz. Obviamente esta más que alegre por él, y había diversas razones, pero principalmente porque el papel de cupido que se había auto asignado por sí mismo había funcionado, y claramente porque su hermano merecía ser feliz, esa era la vibra que sintió en él apenas lo vio entrar en el lugar junto a Steven.

— eres el primero en saberlo, el único de hecho. Decidimos que lo mantendríamos en secreto así que...—Danny se acerca lo más que puede a su hermano menor, desde su posición, para clavar un cuchillo en la mesa, muy cerca de la mano de este y sentenciar— le dices a alguien y te juro que esta vez no te la perdono.

Matt se traga el nudo que se le ha formado en la garganta y luego de bajar la vista al brillante cubierto sin filo que su hermano sostiene dice:

— mi silencio es absoluto, aunque considero que el mantenerlo en secreto es totalmente absurdo e innecesario, están siendo un poco obvios —apenas su última palabra a surcado de su boca, Danny procede a mirarlo con ojos entrecerrados y hostiles— claro, no es asunto mío... aunque ¿Qué es lo que ya me has perdonado?

— el que fueras de chismoso y le dijeras que yo era Charlie ¿es que acaso no lo recuerdas?

— has olvidado un pequeño detalle, hermanito. Yo no se lo dije —Danny ladea su cabeza como advertencia de que no insista— bueno, le di los indicios.

El mayor de los Williams niega con un movimiento de cabeza al mismo tiempo que frunce sus labios, depositando el cubierto sobre la mesa y recuperando la compostura para contemplarlo por unos segundos más y luego ver desde la distancia a Steve y Grace bailar.

Debe de ser honesto, sin el empuje de Matthew no se habría acercado realmente a él, aun si en un momento su corazón lo hubiera traicionado, sabe perfectamente que no se habría atrevido. Suspira y vuelve la cabeza hacia Matt para decirle con sinceridad:

— gracias —el menor de los hermanos alza las cejas y luce levemente asombrado— creo que...si no fuera por ti, nada de esto habría sucedido, jamás....

— yo creo que de todos modos habría sucedido. Con o no mi presencia, habrían terminado de cierto modo juntos, es como si el destino les dijera que debieran de estarlo —contradice el menor de los Williams dándole una palmadita en el hombro antes de colocarse de pies al ver que Steve y Grace se acervan a ellos por el cambio de canción— ­ deberías darte un poco de crédito, cuando llegue a la isla te recogí en su casa, vistiendo de seguro una camisa del —comenta con una expresión divertida para casi correr hacia quienes se acercaban a la mesa— ahora bailaras con el tío Matt, princesa —exclama cambiando de tema, logrando que la pequeña se emocione aún más de lo que estaba y que tanto como Steve y Danny sonrían enternecidos por la reacción de la menor.

Por su parte, McGarrett vuelve a tomar asiento a su lado, para contemplar de forma especial a quien se ha mantenido en la mesa todo el tiempo, el cual se percata y lo cuestiona de inmediato al respecto:

— ¿tengo algo en la cara?

El ex-marin curva sus labios en una sonrisa sincera para simplemente decirle:

— tienes una vida y una familia hermosa, Danno — comenta sin más— gracias por querer compartirla conmigo, gracias por este día, ha sido el mejor que he tenido en mucho tiempo —el rubio frunce el ceño y apoya a la mesa sus brazos para acercarse un poco más a quien está sentado a su lado.

— gracias —responde a lo primero, pero inevitablemente le cuestiona— pero ¿a qué se deben esas palabras?

Steve tiene la respuesta que resulta ser tan simple, tan irrelevante tal vez para los demás, pero que para él no lo es, porque está llena de significados.

La otra faceta de la Luna.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora