Despertó a la mañana siguiente siendo totalmente consciente de lo sucedido la noche anterior, con la clara verificación de verlo a él, aun dormir a su lado y en la misma cama bajo las mismas sabanas.
Él es totalmente capaz de admitir su rechazo de un comienzo, luego su aceptación, cuando le devolvió el beso y ahora, el querer ser inmaduro negando todo cuando están desnudos en la misma cama. O si, él pudiera serlo, pero ¿Qué ganaría? Una discusión o que terminaran como la vez anterior... lo medita en silencio Daniel, mientras deja escapar un gran suspiro contemplando a su acompañante dormir aun, sin molestia alguna pese a los rayos de sol que se cuelan por la cortina de la ventana.
Lo piensa un poco más, no puede huir, después de todo están en su cama y casa, además él ya es un adulto, puede perfectamente darle la cara a momentos como este...
— hola —deja su línea de argumentación cuando es interrumpido y contempla a Steve, el cual ya tiene sus ojos puestos en él— ¿Cómo te sientes?
— bien.
Responde obedientemente, y cerrando los ojos de inmediato luego de haberlo hecho, aceptando ya no saber con exactitud qué hacer, lo que resulta ser captado por el otro, quien no le confesara que despertó un poco antes y pretendió estar dormido, además de haber estado igual que él, solo que ya ha pensado al respecto y está más preparado, razón por la que opta por decir:
— sé que es un poco tarde o quizás demasiado tarde... creo que nos saltamos varias etapas, quiero decir, esta fue nuestra segunda vez... —aparta un poco la sabana, incorporándose y captando la atención absoluta de quien está a su lado— lo que quiero decir, es que... ¿podríamos tener una cita? Quiero decir ¿quieres tener una cita? —hace una expresión nerviosa porque realmente no ha salido como planeo.
Danny esta asombrado, no tenía en mente eso y de repente es consciente de que ellos rompen los esquemas, estándares y protocolos para esto de las citas. También de que esperaba de todo, menos tal invitación.
Por su cabeza primero pasa la opción de rechazarlo, tiene demasiado que pensar, pero es más consciente de que su hermano, en su papel de cupido, le sacaría en cara que es un idiota si llegase a negarse, pero por mucho que sea eso o lo otro, la realidad es que quiere hacerlo, quiere intentarlo, la atracción que siente por Steve simplemente se elevó y debe ser honesto tuvo las mismas sensaciones que cuando lo hicieron la primera vez.
"¿Qué puede salir mal?"
— está bien —responde consiguiendo que Steve sonría aliviado— pero mantengámoslo entre nosotros.
Steven comprende lo último, de cierto modo, porque si lo piensa un poco más hay varios puntos para tal condición, como la reacción de sus hijos, familia, amigos y todo lo demás en los que no quiere pensar por ahora.
— no tengo problemas en eso —acepta sentándose a la orilla de la cama para colocarse de pies, vistiendo sus calzoncillos que son examinados, así como su espalda por su acompañante— va a ser nuestro secreto —añade una vez que está cerca de la salida del dormitorio— eso lo hace más divertido —conclusión girándose a verle— Ve a tomar una ducha, yo ya lo hice, así que por mientras tu estas en eso, preparo el desayuno —sugiere antes de salir, regalándole una mirada coqueta, así como una sonrisa a Danny.
Danny hace lo último pese al leve dolor que siente en su espalda baja y poco sorprendido de las marcas que sobre destacan en gran parte de su piel, vistiéndose de paso con su ropa habitual para ir al trabajo, una vez listo, sale encontrándose a Steven ya vistiendo la ropa del día anterior, sentado en la mesa comiendo lo que ha preparado, invitándolo a que se siente.
No tiene objeción al respecto, de hecho, esta cómodo con la situación y aunque no sea capaz de admitirlo en el momento, acepta que le es mucho mejor tener a alguien con él en el desayuno, mucho más, cuando comienzan una especie de discusión sobre cómo es mejor preparar el café, todo le resulta más agradable y aquella casa que ha habitado todo ese tiempo le pareció más confortable.
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La otra faceta de la Luna.
Fanfiction"Mi error fue convertirte en mi debilidad, Daniel." Steven McGarrett es un asesino a sueldo, el cual es contratado para un trabajo que lo lleva de regreso a casa, su querida tierra Hawaiana. Mismo lugar en el que se reencuentra con todos los amigos...