MENTIRAS
Sunshine
Sicilia, Septiembre 17
Estoy irritada, es la primera vez que viajo en avión publico y... ¡Dios!
—Pasaporte. —piden y saco la tarjeta que paso con mi imagen y datos.
Me mantengo seria, no entiendo el porqué de la gente sonreírle a los oficiales de los aeropuertos. Mi pasaporte lo deje, con esta tarjeta puedo pasar por cualquier parte del mundo sin problema, —todos los militares tenemos una—. Pongo mi pulgar en la pequeña maquina que agarra mi huella.
— Benvenuto in Italia. —me dicen y no respondo pasando de largo. (Bienvenida a Italia)
La gente se pasea con maletas de un lado a otro, yo cargo la mochila donde llevo tres cambios de ropa, parezco una turista mas con los pantalones oscuros, la camiseta blanca que deja ver mi abdomen y el suéter de Steel.
La gente esta cargando su maleta y se toman fotos como si venir a Italia fuera la cosa mas maravillosa.
Estoy cansada de venir aquí, no me malinterpreten me encanta este país, pero... para alguien que ha viajado todo el mundo pues no es la gran cosa.
La gente se toma fotos en el letrero, cerca de la bandera y rodeo los ojos saliendo del aeropuerto, entrando oficialmente a terreno de la Cosa Nostra.
La brisa golpea mi cuerpo erizando mi piel, no esta tan frío aquí pero, vamos que el cuerpo tiene un tipo de sensor que te hace saber cuando estas cerca del peligro.
Adriano debe saber que ya estoy aquí.
Es solo cuestión de tiempo, va asegurar el hecho de que estoy sola, —lo estoy— pido un taxi poniendo la dirección del hotel donde me voy a quedar, me subo en el coche de vidrios polarizados y recuesto la cabeza en el asiento tomando aire por la nariz una y otra vez.
Se dice que los miedos mas grandes se conquistan viéndolos de frente, no le tengo miedo a Adriano Vella, ni a la Cosa Nostra. Pero tenerlo frente a frente me tendrá frente al miedo de perder a mis hermanos. Perder a los donde hombres que mas adoro en este mundo.
Me paso la mano por la cara bajándome del coche, cierro la puerta del vehículo antes de comenzar a entrar en el hotel.
Es un cinco estrellas, la entrada tiene una fila de macetas blancas que tienen arboles de limones amarillos sembrados, la gente sale y entra. Las paredes altas me reciben al entrar al vestíbulo, donde un botones se acerca tomando mi mochila mientras confirmo mi reservación.
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LUJURIA
RomanceCuarto libro. Segunda generación, de mi saga anterior. +18 Pecadores de tiempo completo... el pecado vive en el alma de los trillizos Hoffmann, son tres seres diferentes pero atados por una misma cadena, una pesada que no pueden ni quieren cortar...