Cry Baby

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Ship: Cho Chang x Ginny Weasley
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Parece reemplazar su cerebro por su corazón. Se toma las cosas tan fríamente y luego se deshace.

Desde la primera vez que la vio caminando de la mano de Cedric Diggory pensó que era la chica más bella que había visto en toda su vida, una extraña sensación se impregnó en su vientre, sensación que años más tarde volvió cuando la misma chica se convirtió en la primera novia de Harry.

Su joven mente pensó que aquellas sensaciones tan extrañas eran admiración y celos, aunque años más tarde descubriría que lo que en realidad sentía era atracción.

Aquella fría tarde de febrero Ginny había optado por no salir del castillo. Tenía nulas ganas de ir a Hogsmeade a ver como las melosas parejitas se demostraban su amor de la manera más cursi y empalagosa posible.

No es que tuviera nada en contra del amor o algo por el estilo, no podría tener algo en contra de una sensación que jamás había experimentado. Es solo que, el día de San Valentín tenía que ser su festividad menos favorita. Los chillones colores rojos y rosas atascando cada pasillo, local y sala que estuviera a la distancia; las horrendas y cursis propuestas de amor; los estúpidos y carísimos detalles que se regalaban aquel día; los jodidos querubines endulzando todo de una manera que llegaba a ser empalagosa. Todo de esa jodida celebración la ponía de malas.

Lastima que aquel fuera el único día del año en el que Hermione se permitiera dejar salir su lado más meloso y cursi, celebrando cada año a pesar de no tener pareja con quién hacerlo. Y por más que Ginny le tratara de explicar que ella odiaba ese día del año en específico, año tras año, la castaña intentaba convencer a su amiga de pasar una "velada-romántica-sin-pareja".

—Tal vez dejarías de ser tan amargada en lo que a San Valentín respecta si te consiguieras un novio —Habían sido las palabras de Hermione, que se alistaba para disfrutar del amoroso ambiente que bañaba Hogsmeade en aquella época del año—. Aunque tampoco es que sea un requisito, mírame a mí; no tengo novio pero amo este día.

—Eso es porque tú eres una experta en cursilerías, y yo no quiero un novio —masculló Ginny sentada al borde de la cama, mientras veía como su amiga se ponía unos aretes en forma de corazón de color rosado cuyos tonos variaban entre fucsias y pasteles—. Además, ¿qué no te vas a colar en la cita de Harry y Chang?

—¡No me estoy colando! —chilló indignada.

—Mal tercio —se burló la pelirroja entre toses falsas para ocultar su comentario.

—Si hubieras accedido a ir conmigo no tendría por qué ser el mal tercio —le espetó sentándose a su lado en la cama—. Ven conmigo, el caldero chorreante vende sus famosas cervezas de mantequilla rosadas especiales edición San Valentín. ¡Oh, y después podemos comprar golosinas en Honeydukes! Le agregan fresa a los chocolates y bombones en esta época del año  —canturreó la chica emocionada.

—¿Quién lo diría? Hermione Granger emocionándose por algo tan banal como el día de San Valentín —dijo y Hermione le dedicó una mala mirada. Ginny giró los ojos y dejó caer su espalda contra el colchón de la cama de su amiga—. Por más que me encantaría ir a comprar chucherías a un precio más alto de lo normal y congelarme allá afuera contigo, tendré que negarme. Ya hice planes.

—Ah, ¿si? ¿Con quién?

—Conmigo misma. Ginny y yo iremos a robar tartas a la cocina para después dar una romántica vuelta por el comedor y terminar la hermosa velada entre las calentitas cobijas de mi cama —soltó ella acunando su propia cara entre sus manos, para darle un efecto más "romántico" a sus palabras—. ¿Quién dice que no sé planear una velada romántica?

CryBaby [Fictober 2021]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora