Texto 28

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Todos conocemos la frase: "Levántate y anda". Son 3 palabras que cada uno puede recibir de una forma u otra. Podemos andar de muchas formas... rápido, lento o normal. A mí me gusta interpretar estos tres andares de formas diferentes a cada uno. Andamos rápido cuando tenemos prisa, cuando queremos las cosas a la de ya y no tenemos paciencia. Sin embargo, no podemos ver los accidentes. No podemos ver los problemas. No podemos ver nada. Caminamos lento, cuando queremos ser prudentes, y seguros. Estas personas, tienen mucha paciencia, y saben que con esfuerzo se consiguen lo que cada uno se propone, y no les cuesta nada esperar. Aquí, esas personas, observan los detalles, fijándose en todo lo que les rodea, analizándolo todo, viendo venir los problemas. Cuando caminamos a un ritmo normal, cuando de tantas palizas que nos ha dado la vida, decidimos ir de frente, sin un rumbo fijo esperando lo que tenga que pasar. Las personas que andan así... Siento admiración por ellas. Y, no diré nada más. Porque no tendría sentido explicar algo, que debéis vivir por vosotros mismos.

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