Narrador omnisciente
Media hora antes
Seguro esta en la frontera- gritó Isaias mientras corrían.
¿Pero en que parte?- preguntó Josh, todos sabían que la frontera tenía varios kilómetros de extensión- podrían estar en cualquier parte-
Pero entonces un hedor conocido apareció detrás de ellos.
Nathaniel- dijo Matt por el vínculo. Todos frenaron en seco. Todos excepto Matt, quien fue directo al cuello del joven.
Lo aportaba fuerte, su lobo quería matarlo, no tener piedad.
Espera- dijo como pudo el pelinegro- vengo a ayudarlos-
¿Ayudarnos?- preguntó ironico el más grande.
¡Matthew!- gritó su madre- suéltalo, n os ayudará a encontrar a Aiden y Lia-
Sólo tardó un par de segundos porque se sentía satisfactorio ahorcar a Nathaniel.
Están en la tercera marca, como a 3 kilómetros de tu casa-
Hay que ir ¡ahora!- exclamó sabrina y todos se fueron directo a ese lugar.
No sabían con que se iban a encontrar, de todas formas a la luna le faltaba un cuarto para completar la Luna Sangrienta. ¿Cómo será él?¿Me reconocerá?¿Volverá a ser el mismo Aiden al que me gusta molestar mientras duerme? El moreno tenía miles de preguntas en su cabeza, no quería que su Aiden se convierta en un monstruo.
¡Alira!¡La luna!- Advirtió Isaias a su esposa apuntando a la luna la cual se tiñó de un rojizo intenso.
¡Ahhh!- era un grito de dolor.
Es Aiden- susurró Josh.
Y todos ahí vieron sorprendidos la transformación del muchacho. Monica estaba llorando al ver a su hijo sufrir.
Y se transformó completamente. Alira vio un poco mas adelante y vio a su hija.
¡Es Lia!- exclamó la mujer.
Matt fue corriendo a la misma velocidad que Aiden para atraparlo y evitar que mate a su hermana.
Ambos saltaron, Aiden hacia Lia y Matt hacia Aiden.
Matthew empujó a Aiden, con demasiada fuerza.
¡Crunch!
¡Aiden!- gritó entre llanto la castaña- ¡¿Que has hecho Matthew?!-
El moreno aún no se había dado cuenta de lo que hizo, porque estaba viendo la cara de horror de su hermana.
Monica sólo soltó un grito de desesperación y tristeza.
Alira junto con Sabrina lloraban desconsoladas.
Matthew volteó a ver.. Su cara quedó pálida como la de un vampiro, sintió un sudor frío por todo su cuerpo, él no quería hacer eso.
¿A-Aiden?- preguntó Matt totalmente roto viendo como Aiden volvía a tomar su forma humana, pero no estaba curado, sino que estaba clavado en un árbol partido a la mitad. Su cuerpo estaba perforada por cientos de enormes astillas que eran como espadas.
Los lobos salvajes son vulnerables y no se regeneran.
Eleonor no hizo más que irse, ese era su plan, por ahora.
Aiden- sollozó Matt soltando varias lágrimas.
No fue t-u culpa- le dijo rápidamente Aiden quien estaba agonizando.
Aiden, por favor...- Matt no podía terminar la frase.
Los ojos del castaño estaban perdiendo el brillo en ese árbol, como si su alma se estuviese muriendo.
No te vayas- rogaba y lloraba el muchacho, quien sentía que había hecho el pecado más grande- te daré mi vida a cambio, pero tu no, por favor-
Matt..- susurró Aiden y como pudo con su mano acarició la húmeda mejilla de su novio- te amo-
¡Tú eres mi mate!- gritó desesperado Matt pensando que con esa simple frase Aiden se pudiese salvar.
¿Y ahora me lo dices?- preguntó con una agonizante risita.
Aiden, te amo, no te vayas-
¡Muerdelo!¡Se hará un lobo puro!- le insinuó Nathaniel rápidamente.
Al instante Matt tomó cuidadosamente la nuca de su novio y la mordió, saboreando su dulce sangre.
Luego agarró el cuerpo agonizante de Aiden y lo sacó del árbol. El chico soltó un gemido de dolor.
Lia estaba llorando tapándose la boca para no gritar.
Y Aiden, el no se estaba regenerando, estaba muriendo.
Sus latidos íban cada vez más lentos, y los ojos se estaban apaganto.
Por favor, no te vayas Aiden-
Te amo-
No lo digas como despidiendote-
Te amo- volvió a decir en un suspiro. El cual fue el último.
Aiden- sollozó Matt- ¡Aiden!¡Despierta!¡Amor!- el más grande sacudía el pequeño cuerpo que tenia entre sus brazos- ¡Despierta!¡No me hagas esto!-
Mónica se acercó a Matt y al cuerpo de su hijo, los miró a ambos con compasión.
Mónica, insultame, golpeame- suplicaba Matt sosteniendo el cuerpo del hijo de Mónica.
Matthew- susurró Monica, puso su mano en la mejilla ensangrentada de Matt- tu no tuviste la culpa-
Yo lo maté- dijo Matt dolido y llorando.
Pero tu no causas te todo eso, corazón- le respondió entre lágrimas la mujer.
Matt sólo empezó a llorar a gritos mientras abrazaba el cuerpo de su novio, quien una vez fue su novio.
La cara y la ropa de Matt se tiñó de roja al igual que la luna, la cual ya dejó de estar de ese color.
¿Entienden porque Aiden no pudo ver más de su visión? Porque nadie puede ver su propia muerte.
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Licantrophes: La Manada Luna Llena
Hombres LoboAiden, un humano como todos nosotros, se embarca en un viaje con su madre desde su ciudad natal (Madrid) a Barcelona por asuntos de trabajo por parte de la mayor. ¿Cuántos de ustedes saben de los hombres lobo? Sí, aquí aparecerán estos míticos y mis...