Parte9

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Si lees este primero vuelve arriba que hay doble capítulo.

El Alfa soltó un gruñido que hizo temblar a todos los presentes de la habitación.

Su mirada se habían vuelto en un color que Xie Lian no había visto hasta el momento.

Un rojo intenso que había apoderado de ella, haciéndolo más salvaje y temible.

-¿Quién fue? -dijo Lluvia Carmesí a Xie Lian en un tono frío.

Xie Lian parpadeó aún un poco confundido por el comportamiento del Alfa.

¿Qué está sucediendo?

-Fue un accidente -murmuró.

Los dedos de San Lang se enrollaron alrededor de la  muñeca del Omega, mientras lo acercaba más a él.

-Gege no estoy bromeando -siseó entre dientes- ¿Quién fue?

El ceño se frunció en el rostro de Xie Lian, quién con algo de fuerza logró liberarse de aquel agarre que comenzaba a doler.

La paciencia de Xie Lian estaba por acabarse, y no quería hacerlo pero comenzaba a molestarse.

Todo lo que había pasado en los últimos días había acumulado una tensión en él. Xie Lian no era una persona violenta ni mucho menos pero todos parecían querer tomar ventaja de ello.

-¿Qué le interesa a San Lang, quién podría haberme hecho daño? -murmuró mirándolo fijamente.

San Lang se alejó un poco para luego soltar un suspiro.

Ciertamente el Omega tenía razón pero aún así la molestia y la preocupación no disminuían de su pecho.

La mirada del Alfa se topó con el hombre que aún estaba aguardando paciente por su jefe.

-Encárgate de todo -le dijo mientras volvía a tomar la muñeca de Xie Lian ente sus dedos, está vez más suavemente.

-Entendido -dijo haciendo una leve reverencia.

El Alfa asintió mientras regresaba por el pasillo de nuevo a las habitaciones arrastrando a Xie Lian junto a él.

Había algo más aparte de aquellos golpes que habían molestado a San Lang.

Y era la mirada rota y vacía que el Omega tenía.

Xie Lian soltó un quejido cuando sintió como el pequeño algodón pasaba sobre su maltratada piel

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Xie Lian soltó un quejido cuando sintió como el pequeño algodón pasaba sobre su maltratada piel.

Desde que Lluvia Carmesí lo había llevado hasta su habitación para curar sus heridas. Ninguno de los dos había dicho nada, aquella atmósfera está siendo sin duda alguna pesada para el Omega.

Tal vez haberse besado había sido un error.

Estaba dispuesto a romper el silencio incómodo pero la voz del Alfa lo interrumpió.

Una mafia de lluvia y flores (Hualian Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora