Una mafia de lluvia y flores (Hualian Omegaverse)

Parte15

Las manos de Xie Lian comenzaron a temblar nervioso.

¿Porque le hacía eso Jun Wu?

¿Qué era lo que le había hecho?

El ceño se frunció en el rostro del Omega, estaba molesto.

Si Jun Wu quería desquitarse con alguien, debía ser él.

Shi Qing Xuan era totalmente inocente en todo aquello.

El Omega había tratado de mantenerlo alejado de todo aquello, pero aún así no había funcionado.

Su celular volvió a sonar está vez con un mensaje de texto, dónde Jun Wu le mandaba una dirección.

Aquel Alfa conocía muy bien que Xie Lian estaría dispuesto a ir por su amigo.

El Omega guardó su celular dispuesto a salir de la habitación necesitaba hacer algo.

No podía dejar que Shi Qing Xuan estuviera en las manos de aquel hombre.

Si lo único que él necesitaba para dejarlos en paz era el mismo, Xie Lian estaba dispuesto a asumir el riesgo y las consecuencias.

Apartó las suaves cortinas para encontrarse con Hua Cheng que había regresado.

Observando como la mirada del Alfa se oscurecía al verlo.

-¿Qué ocurre Gege? -dijo con voz grave.

Xie Lian no supo si reír y llorar.

¿Tan mala era su expresión que San Lang lo reconoció enseguida?

O, ¿Lluvia Carmesí lo comenzaba a conocer mejor de lo que quería admitir?

-Yo... -Xie Lian pensó muy bien como continuar, tenía miedo.

Por Shi Qing Xuan, por Hua Cheng y por todo lo que Jun Wu podía ser capaz de llegar a hacer.

Una suave caricia lo volvió a la realidad, los dedos de Hua Cheng se posaron en su mejilla acariciando.

-Gege si hay algo en lo que pueda ayudar solo dímelo -dijo el Alfa suavemente.

Tal vez Xie Lian no era del todo consciente pero la tristeza y la preocupación estaba presente en la suave fragancia que dejaba salir.

Y eso hizo sentir molesto a Lluvia Carmesí.

Se suponía que al llevarlo con él, todas sus preocupaciones debían disminuir pero aquello no parecía ser así.

El Alfa se acercó aún más al Omega haciendo que la mirada de Xie Lian se encontrará con la suya.

-Quiero que sepas que puedes decirme lo que sea y siempre haré lo que esté en mis manos para ayudarte

Xie Lian parpadeó.

Muchas veces se ponía a pensar en cómo había resultado todo.

Aquel cruel, despiadado y territorial Alfa que le habían descrito. ¿Realmente era la misma persona que lo estaba mirando con ternura?

El Omega realmente tenía ganas de llorar.

¿Así es como se siente cuando alguien realmente se preocupa por tí?, Pensó.

Sus padres habían muerto cuando aún era un poco pequeño, así que ya había olvidado como era tener ese sentimiento.

-Jun Wu -murmuró el Omega luego de unos momentos.

Ahora el ceño se hizo más profundo en el rostro del Alfa.

-Jun Wu secuestro a uno de mis amigos, San Lang yo debo hacer algo por mi culpa ellos están en peligro