Extra5

1.6K 224 33
                                    

Xie Lian parpadeó sorprendido cuando observó como Hua Cheng se encontraba sentado sobre su cama mientras comía del plato de patatas con chocolate derretido que el Omega había dejado en su mesita para calmar sus extraños antojos.

El Alfa se encontraba con la mirada perdida en algún punto de la habitación mientras que el Omega permanecía en el marco de la puerta observándolo tiernamente.

Una pequeña sonrisa apareció en sus labios antes de ingresar a la habitación.

-San Lang, ¿Te encuentras bien? -preguntó con cierta burla en su tono.

Hua Cheng alzó su mirada encontrándose con él, y rápidamente su ceño se frunció al notar lo que su mano sostenía.

Inmediatamente lo dejó en el plato.

-Yo... -comenzó sacudiendo su cabeza intentando alejar el horrible sabor- Gege, ¿Cómo puedes comer algo como esto?

Xie Lian río dejando un beso en una de la mejilla del Alfa y se sentaba a su lado.

-Puedes preguntarse eso al bebé -sonrió acariciando su vientre- Cada vez los antojos son más extraños

-Ya lo noté -dijo negando con la cabeza.

-Pero supongo que no es del todo malo -continuó el Omega mientras se inclinaba cuidadosamente para rozar sus dedos sobre el chocolate que permanecía en el plato.

El Alfa siguió sus atentamente sus movimientos, antes de sorprender al sentir como las puntas de los dedos de Xie Lian acariciaban sus labios.

Dejando el frío dulce sobre ellos.

Hua Cheng alzó una ceja provocativamente antes de acercase y dejar un beso sobre sus labios.

El Omega sonrió en medio del beso al sentir como el Alfa lo profundizaba completamente complacido.

Sin duda alguna de esa manera aquel chocolate sabía aún más dulce.

Xie Lian envolvió sus brazos alrededor del cuello de su Alfa, olvidándose de su alrededor.

Pero antes de si quiera pensar en continuar con sus caricias.

Hua Cheng se separó de repente.

-¿Qué es ese desagradable aroma? -pregunto con la sombra de asco en su rostro.

-¿Cuál aroma? -respondió el Omega con el ceño fruncido, sin comprender muy bien- San Lang,  ¿Realmente te encuentras bien?

-No -alcanzó a responder el Alfa para luego salir rápidamente dirigíendose hasta el baño.

Dejando a un Xie Lian totalmente confundido.

-¿Te he dicho en eres desesperante? -comentó He Xuan observando como Hua Cheng volvía a guardar su arma en la cinturilla de su pantalón

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Te he dicho en eres desesperante? -comentó He Xuan observando como Hua Cheng volvía a guardar su arma en la cinturilla de su pantalón.

El otro Alfa lo miró molesto, mostrando levemente sus colmillos.

Una mafia de lluvia y flores (Hualian Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora