𝐌𝐏▬▬ 𝐇𝐀𝐋𝐋𝐈𝐄 𝐘 𝐇𝐀𝐑𝐑𝐘 𝐏𝐎𝐓𝐓𝐄𝐑
❛Los niños que vivieron❜
Son huérfanos y viven en casa de sus tíos desde que tienen memoria donde los tratan como si fueran sus esclavos. Un día los hermanos reciben muchas cartas la cuales c...
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Narra Hallie
Fue el castigo más largo de nuestras vidas, en las noches nos escabullíamos rumbo a la cocina para buscar algo que comer. Si, nuestros desgraciado tíos nos dejaban pasar hambre. Solo nos llevaban una comida al día y aún así no era lo suficiente.
Cuando nos dieron permiso para salir de la alacena ya habían comenzado las vacaciones de verano.
Harry y yo nos alegraba de que el colegio hubiera terminado, pero no había forma de escapar de la banda de Dudley, que visitaba la casa cada día. Eran todos grandes y estúpidos, pero como Dudley era el más grande y el más estúpido de todos, era el jefe. Los demás se sentían muy felices de practicar el deporte favorito de Dudley: cazar a los Potter
Por esa razón, nosotros pasábamos tanto tiempo posible fuera de la casa, paseando y pensando en el fin de las vacaciones, cuando podría existir un pequeño rayo de esperanza: en septiembre estudiaríamos en secundaria y, por primera vez en nuestras vidas, no iríamos a la misma clase que nuestro primo.
Dudley tenía una plaza en el antiguo colegio de tío Vernon, Smelting. Mientras que Harry y yo Potter, iríamos a la escuela secundaria Stonewall, de la zona. Dudley encontraba eso muy divertido.
-Allí, en Stonewall, meten las cabezas de la gente en el inodoro el primer día - le dijo a Harry- ¿Quieres venir arriba y ensayar?
-No, gracias -respondió Harry
-Los pobres inodoros nunca han tenido que soportar nada tan horrible como tu cabezota y pueden marearse - dijimos al mismos tiempo, mi hermano tomo mi mano para salir corriendo antes de que Dudley pudiera entender lo que les habíamos dicho.
Eso nos pasaba casi siempre. Decir frases al mismo tiempo, es como si pensáramos lo mismo en el momento justo. Para muchas personas era aterrador -sobre todo para nuestros tíos- pero para nosotros era una especie de "don". Era como si tuviésemos telepatía...
Un día del mes de julio, tía Petunia llevó a Dudley a Londres para comprarle su uniforme de Smelting. Aquella tarde, Dudley desfiló por el salón, ante la familia, con su uniforme nuevo.
Mientras miraba a Dudley con sus nuevos pantalones, tío Vernon dijo con voz ronca que aquél era el momento de mayor orgullo de su vida. Tía Petunia estalló en lágrimas y dijo que no podía creer que aquél fuera su pequeño Dudley, tan apuesto y crecido. Si claro, "apuesto", parecía más una pelota con corbata y lo único que ha crecido es del ancho no de altura.
Harry y yo intentábamos aguantar para no estallar en carcajadas en aquella extraña situación. ¿Orgulloso de Dudley? Lo mejor que hace es comer, golpear a niños menores que el por el simple hecho de existir y quejarse arrastrándose en el piso lloriqueando por no conseguir que le dieran algo.
