Antes de ti, no
Yo no creía en Romeos, Julietas
Muriendo de amorEsos dramas
No me robaban la calma
Pero la historia cambióPero esta historia me cambió...
Antes de conocerlo, jamás había creído en esas tonterías de amor a primera vista, almas gemelas, ni nada de eso. Le parecían hasta ridículas obras como "Romeo y Julieta", porque ¿quién diablos se mataría por "amor"?, ¿acaso esa mujer no tenía amor y criterio propio para seguir su vida sin el mentado Romeo?
No le gustaba en lo absoluto ese tipo de cosas, lo cual sorprendía a quienes no lo conocían. Prejuicios, prejuicios y más prejuicios... Todo mundo creía que por ser un doncel, y por su linda apariencia y vida de ensueño, sería un completo aficionado a ese tipo de cosas, pero nada más lejos de la realidad.
Era el hijo menor de la familia Lindbergh. Fruto del matrimonio del rico empresario hotelero Hypnos Lindbergh, y su esposa, la famosa diseñadora Pasítea Alexopoulos.
Podía decir que lo tenía todo: una innegable belleza heredada de su madre, inteligencia, porte, gracia, dinero, una familia amorosa... Y sí, lo tenía todo, debía reconocerlo, pero no dejaba de molestarle que la mayoría de las personas lo considerasen un inútil solo por su linda apariencia.
Sus hermanos mayores, Albafica y Cardinale, también eran bastante bellos, pero la atención de todos siempre terminaba yendo a él, diciendo lo hermoso que era, y que debería considerar seriamente ser modelo.
No tenía nada en contra de aquel trabajo, pero no era lo que él quería. Él desde niño había soñado con convertirse en botánico, y no había cesado en su intento.
Pero aún teniendo una familia perfecta, bien dicen que nada dura para siempre, y no todo puede ser siempre de color rosa. Y las cosas comenzaron a complicarse cuándo uno de sus hermanos y su madre casi fueron secuestrados.
Sus padres se alarmaron a más no poder, y no tardaron ni cinco minutos para contratar un guardaespaldas personal para cada miembro de la familia, que los vigilase las 24 horas del día. Albafica, quién casi fue víctima de un secuestro junto a su madre, no se opuso para nada, y aceptó. Cardinale protestó por un par de minutos, pero al pensarlo mejor, decidió aceptar. Y él, aunque incómodo, aceptó, sabiendo que corría peligro.
Desde el día en que los guardaespaldas habían llegado a la mansión habían pasado ya casi seis meses.
El guardaespaldas que le asignaron a él, era un hombre joven, de su misma edad. Moreno, de cabellos azulados, y unos peculiares ojos violeta.
Angelo era su nombre, pero "por seguridad", en palabras de su guardián, se dirigía a él con el nombre clave "Death Mask".
Al inicio, ellos dos se llevaban como el perro y el gato, al contrario de sus hermanos con sus respectivos guardaespaldas, que congeniaron casi al instante. ¿Cómo no llevarse mal, si eran prácticamente polos opuestos?
Afrodita era un jovencito educado, estudioso, callado y reservado. Todo lo contrario de su protector, que era un mal hablado, vulgar, escandaloso y grosero.
Todo fue difícil al inicio, no se llevaban bien, y el tener que pasar todo el día juntos terminaba por agotarlos. Pero con el pasar de los días, las peleas y discusiones fueron siendo cada vez menos frecuentes, hasta que finalmente se hicieron amigos.
Afrodita pasó toda su vida criticando tanto a los personajes de novelas, películas y cuentos de romance, que ahora se sentía estúpido por comprender cómo se sentían. Ni siquiera se dió cuenta en qué momento, pero terminó enamorándose de su guardaespaldas, y al parecer, era correspondido.
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Saint Seiya. Songfic's Yaoi
FanfictionPues, como dice el título, aquí se publicarán songfic's (Fanfic's basados en una canción.) que me pidan. 🔴[Pedidos cerrados]🔴