Darte un beso [📿Shaka x Mu🐑]

369 20 18
                                    

Amarte como te amo es complicado
Pensar como te pienso es un pecado
Mirar como te miro está prohibido
Tocarte como quiero es un delito

La alarma de su despertador le anunciaba que era un nuevo día, y debía levantarse para comenzar su día.

Hizo su típica rutina; levantarse, tomar una ducha, vestirse, peinar sus largos cabellos rubios, alistar su mochila, y salir de casa, rumbo a la universidad.

Hace tiempo dejó de ser un estudiante, pero seguía teniendo que asistir a esa universidad, aunque ahora era como profesor.

Tenía apenas un par de años de haber comenzado a trabajar en la misma universidad de la que se había graduado, y seguía poniendo el mismo esfuerzo que el primer día.

Hoy comenzaba un nuevo año, tendría alumnos nuevos, y eso siempre asustaba un poco.

Bebió su taza de té, tranquilizandose, y salió de casa, listo para comenzar su día.

Al llegar, fue a su salón después de reportarse y recibir indicaciones de la administración.

Tomó una bocanada de aire cuándo estuvo en la puerta, y después ingresó.

Nada fuera de lo común; chicos y chicas que no pasaban de los 18 o 19 años de edad, quizás uno que otro de 17 como él en su tiempo, nerviosos por su primer día como universitarios, algunos más preocupados por su apariencia que por sus estudios... Había de todo en la viña del señor.

Los chicos lo miraron un poco confundidos al verlo sentarse en el escritorio del profesor, era comprensible, y ciertamente, ya estaba acostumbrado.

No los culpaba, no era común que un Omega ocupara un puesto de trabajo como profesor. Además de que los chicos de nuevo ingreso a menudo lo confundían con un compañero de su grado, o en el mejor de los casos, con un chico de un grado superior. Verse mucho más joven de lo que realmente era a veces representaba una desventaja.

- Buenos días, jóvenes.- Inició, saludando a los jóvenes adultos.- Mi nombre es Shaka Laghari, y seré su profesor de Anatomía durante éste semestre.

Durante el tiempo que llevaba enseñando, había aprendido que preguntas cómo: "¿Qué edad tiene?", "¿No es muy joven para ser maestro?", "¿Seguro que usted es el profesor?", "¿Un Omega es nuestro profesor?", y cosas así no tardarían en aparecer. De cualquier forma, solo las respondería y seguiría su clase.

Tal y como temía, preguntas de ese tipo estaban a punto de surgir, cuándo una inesperada interrupción apareció por la puerta.

- Buenos días, señor Laghari.- En la puerta se encontraba el que alguna vez fue su profesor, pero que actualmente era su jefe y colega.

- Buen día, profesor Huáng.- Saludó de vuelta al mayor.- ¿Necesita algo?

- Creo que por poco y pierde a uno de sus estudiantes.- Bromeó el castaño, señalando con la mirada a un joven peli-lila que permanecía en silencio a su lado.- Aquí es la clase, chico. Tranquilo, el señor Laghari no muerde.

Shaka rápidamente se percató de ciertas peculiaridades en el joven. Para en primer lugar, notó que el chico era un Omega, el aroma dulzón que desprendía y su fisonomía no engañaban a nadie. Y en segundo lugar, su aparente alumno, a pesar de no ser precisamente viejo, si que era un poco mayor comparado con los demás estudiantes de primer año. No habría más que uno o dos años de diferencia a lo mucho entre su edad y la del resto del grupo.

- Adelante.- Se dirigió al joven, que hizo una pequeña reverencia, e ingresó al aula.- Gracias por traerlo, profesor Huáng.

- ¡Ey!, ya te dije que no me llames tan formal, me haces sentir viejo.- Le reclamó casi susurrando el mayor.- Solo dime Dohko y ya, ¿de acuerdo, Shaka?

Saint Seiya. Songfic's YaoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora