El amor cuando llega no avisa
No esperaba encontrarlo en este lugar
Tiene un tono mentiroso y egoísta
Pero si viene contigo no está tan malEra un día más en la universidad Athena's Realm.
Un precioso chico rubio de ojos verdes caminaba por los pasillos, tratando de permanecer lo más lejos posible de todos los demás estudiantes.
Nada parecía estar fuera de lo normal, llegar al instituto, tomar el camino largo para tener el menor contacto humano posible hasta llegar al aula, para después sentarse en un solitario rincón en la parte de atrás hasta que terminara el día... Su típica rutina a la que ya estaba acostumbrado, o eso parecía, hasta qué...
¡Pum!
Iba tan distraído con sus propios pensamientos, que ni siquiera notó la presencia de alguien, hasta que chocó de bruces, cayendo sobre su retaguardia.
- ¡Oye ¿que te pasa?!- Reclamó enfadado, mientras recogía sus cosas.- ¡Fíjate por dónde caminas!
En realidad había sido su culpa por no ver hacía el frente, pero lo que Cardinale tenía de hermoso, le sobraba de orgulloso, y jamás admitiría su culpabilidad por más obvia que ésta fuera. Más fue su sorpresa al no recibir ninguna respuesta hablada, y en cambio, tan solo vió como el desconocido le tendía una mano.
Tardó unos segundos en reaccionar, no se esperaba para nada esa reacción. Aunque el atractivo físico de aquel chico era innegable: piel blanca, pero levemente bronceada, largos cabellos rojizos, y unos bellos ojos celestes.
- D-Déjame, puedo levantarme solo.- Rechazó la ayuda, golpeando la mano del pelirojo.- ¿Qué pasa contigo?- Comenzó a mostrarse agresivo nuevamente, al percatarse de que el desconocido no le quitaba la vista de encima.
El pelirojo no respondió nada, solo desvió la vista. A Cardinale la actitud de ese chico se le hacía sumamente extraña, guardó sus libros en su mochila, y se dispuso a seguir su camino, pero sintió cómo el pelirojo le sujetó de la muñeca.
Estaba dispuesto a voltearse y propinarle un puñetazo, no soportaba para nada el contacto físico de ningún tipo, por eso se mantenía alejado de todos, ¿cómo se atrevía ese tonto a tocarlo?
Pero sintió que el pelirojo le puso algo en la mano. Al abrir su puño, notó un pequeño pedazo de papel en su palma.
Miró de reojo al pelirojo, y después desdobló el papel, era una nota.
- "Lo siento. No puedo hablar."- Leyó en voz alta lo escrito, para después mirarlo nuevamente.- ¿Eres mudo acaso?
El desconocido asintió con la cabeza, agachando la mirada, como si le avergonzara su problema.
Cardinale no supo cómo reaccionar de inmediato, y un silencio se apoderó del ambiente por unos largos segundos.- ¿E-Eres nuevo?- Tartamudeó nervioso.
El pelirojo asintió.
- ¿A qué salón vas?
El chico pelirojo comenzó a escribir en un pequeño cuaderno, para después entregarle la nota.
- ¿"2-3 de anatomía. Facultad de medicina"?- Leyó en voz alta el mensaje nuevamente, recibiendo un gesto afirmativo.- Yo también voy a esa clase. Puedes venir conmigo si quieres.- Añadió, desviando la mirada.- Pero te lo advierto, no se te ocurra volver a tocarme, o entonces no me hago responsable de mis actos, ¿capisci?
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Saint Seiya. Songfic's Yaoi
FanfictionPues, como dice el título, aquí se publicarán songfic's (Fanfic's basados en una canción.) que me pidan. 🔴[Pedidos cerrados]🔴