mundo sub-real.

Capítulo 27

Despierto con mi cabeza recostada en el pecho de mina, me duele todo, pero esos gratos recuerdos llegan a mí, y una sonrisa se escapa de mis labios.

W: buenos días, susurra con su voz ronca.

- buenos días señora directora, digo en modo de juego.

W: señorita layra se puede saber que hace usted aquí en mi cama y para colmo desnuda, dice para seguirme el juego.

- no lo sé, alguien me trajo.

W: se siente bien despertar así, y quiero estar mucho tiempo así, pero se no hizo tarde y debemos arreglarnos. Dice con mucha tranquilidad. Yo me siento y empiezo a buscar mi ropa con mi mirada.
Logro ubicar cada prenda.
Tengo la ropa puesta, así que me marcho a mi habitación a hoy creo que es domingo, no sé.

W: cariño hoy es día de visita, tu mandre vendrá.

- ¡qué! Yo no quiero verla.

W: entiendo que estés enojada, pero ella ya viene en camino.

- ella sabe en el lugar dónde yo estoy realmente.

W: no y no debes decir nada. Los otros padres saben la verdad de este lugar, hay que preocuparnos en que no vayan a acercarse a tu madre. Pueden sin querer ponernos en evidencia.

-ah. No quiero. Esta bien.

W: bien ahora a actuar. 

Me acerco a su ella y le dejo un beso, casto en los labios, pero ella quiere más, nuestro beso se prolonga, a pesar de lo que pasó siento como si la besara por primera vez.

Yo me voy a la habitación, me doy una ducha, abro el armario y me encuentro con un vestido púrpura y una nota.

Quiero verte de púrpura, además tienes que hacerlo, para que luzca como nuestro vestuario..

Pd: cuando acabes de hablar con tu madre, vas a mi oficina..

Me pongo el vestido que me queda como anillo al dedo, perfecto, observó por la ventana y veo coches muy lujosos llegar, y se bajan los que supongo serán familiares de los otros chico, estoy tratando de imaginar el encuentro con mi madre pero la tristeza no me deja, pronto tocan a la puerta. Me dirijo a abrirla y me encuentro con miranda.

-¡miranda! Me lanzo a sus brazos y ella me recibe con gusto, sus brazos son acogedores, miranda es una mujer que muy normal como humana le pondría unos 30 años.

M: cómo estás? Nerviosa? Se que no quieres ver a tu madre.

- bueno ya que más da, ahora me toca actuar. Solo tengo una pregunta, por parte de quién yo salí, así... Peculiar. Si se supone que mi mamá no sabe nada de este lugar.

M: es una larga historia. Deberías preguntarle a tú madre.

- pero no puedo preguntarle así simplemente, el por qué soy vampira y bruja.

M: no claro que no, solo preguntale de ti, quien es tu padre. Tu descendencia.

- lo haré.

M: debes irte, justo en este momento está llegando.

- cómo lo sabes?

M: mis instintos bruja, dice de una manera graciosa.

- bien iré.

Me voy por el pasillo mientras veo  a miranda desaparecer, tomo aire, lo más que puedo. Siento que hoy saldrá una gran verdad.

Me dirijo a la entrada dónde veo una mujer con un voluptuoso cuerpo, y su manera extravagante y vulgar de vestir hace que mi cerebro confirme que es ella... Mi madre