mundo sub-real.

Capítulo 33

Mina me lleva hasta la puerta de mi habitación, me da un casto beso, y junta nuestras frentes.

- qué pasa mina?

W: no quiero perderte.

-no me perderás. Solo debemos ser fuertes, levanto su mentón y de nuevo la beso. Nuestro beso se intensifica, lentamente me empuja a la habitación. No me quiero separar de su cuerpo.

W: no podemos, hay que guardar energías. Mañana kate te enseñará hechizos más fuertes, y pueden debilitarte.

- bueno, puedes dormír conmigo al menos.

W: ve a mi habitación cuando te cambies de pijama. Ella se marcha, yo busco mi pijama y me la pongo con rapidez, me voy a a puerta del fondo, y la abro con mucho cuidado, no veo a mina, escucho que se está dando un baño, yo me meto a la cama para esperarla, ella sale con su pijama púrpura de seda. Se acuesta, las luces se apagan, yo me aferro a sus caderas como si fuera un perezoso. Ella acaricia mi cabello, no tardamos en dormirnos, siento que el tiempo paso muy rápido pero la tenue luz del sol, interrumpe la oscuridad de la habitación.
W: layra, hay que levantarnos cariño.

- mmm, otro ratito.
Digo con mi voz ronca.

W: no, hay que ponernos de pie, ahora, ella hace un amago para ponerse de pie, pero yo me aferro a su cadera.

W: está bien.

- mina tengo mareo.

W: hace cuando te alimentaste de sangre?

- no lo recuerdo.

W: tenemos que ponernos de pie para que te alimentes.

- puedo tomar un poquito de ti.

W: no. Deja la flojera.

- y si te convenzo, tu sangre es muy rica. Digo muy coqueta.

W: solo un poco.

Yo me acerco a su pecho, dejo besos húmedos en su pecho, subo a su cuello, y clavo mis colmillos en su suave piel. Ella gime y hecha su cabeza hacia atrás.
Me separó a penas siento su sangre fluir dentro de mí.

W: te ves hermosa, con esos ojos rojos.

- gracias y tu te oyes muy bien gimiendo.

W: no me insites, después te desmayas en pleno hechizo.

- ya, esta bien, si así comenzaré mis días me despertare con la mejor actitud, incluso puedo hacer que mi loca madre viene con un ejercito a rescatarme, es que no puedo odiarte.

W: creo que la cursileria se puede cortar con tijeras por el aire.

- lo siento es mi primera vez enamorandome.

W: primera y última.

Me voy a la habitación me cambio y voy a ver a la señorita kate.