Capítulo 6

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Me levante al día siguiente, no iré al colegio por una semana tengo excusa, el médico me dijo que caminará, me ejercitará un poco, solo veo tele en la mañana, mi  mamá se fue a trabajar, me atiendo sola, de igual manera no lo necesito, salgo a caminar cuando el sol cae un poco más.
Cuando regrese a casa encontré a mamá  y ha maik hablando muy a gusto, quizás se entienden bien porque mi mamá es joven, tiene 34 años, es bastante joven, me tuvo a temprana edad, maik tiene 19 años, se pueden entender con facilidad.
-hola, llegué.
- hola, responden muy animados.  
-cómo te sentiste cariño? Pregunta mamá.
- bien, muy bien.

Cenamos los tres juntos mi mamá, se veía un poco tensa. No le preste atención seguro era por el trabajo.

Maik se fue, yo me fui a darme una ducha, me relaje, y vi una marca cerca de mi pezon, era de color roja, no recuerdo tener esa pequeño lunar allí.
Cómo siempre, no le presto atención. Salgo a darle las buenas noches a mi madre, me dirijo a su habitación pero la escucho hablar con alguien por teléfono, se hablan con mucho cariño, e incluso ella le dice que no puede esperar hasta mañana para que el le haga cosas ricas, me pareció gracioso escuchar eso, dejo de espiar su conversación y toco la puerta, ella cuelga y se pone nerviosa, le doy las buenas noches y me voy a la habitación. Esta vez estoy muy cansada, ni siquiera despierto en la noche, el siguiente día llega, comienza como mi día anterior. Veo tele y cuando la tarde llega me voy a caminar, me tomo el atrevimiento de trotar, me siento con mucha fuerza para hacerlo, llego a casa mucho más temprano que ayer,  entro y cierro la puerta, extraños sonidos provenientes del habitación de mamá hacen que me acerque a ver que pasa, abro la puerta sin aviso y no puedo creer lo que veo.

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