Capítulo XXVIII

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XXVIII

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XXVIII. El enfrentaiento del rey


Una pequeña reunión del consejo sin Jon Arryn se sintió como una reunión de extraños para Robert.


Con la Mano en Dorne hablando de negocios con el Príncipe Doran, le correspondía a Robert convocar las reuniones con pesonas con las que no se sentía cómodo.

Conspiradores, todos ellos.

-Lord Tywin ha proporcionado suficiente oro para armas en caso de un ataque, Su Excelencia-Lord Baelish habló con ese tono ronco suyo.

Robert asintió una vez con la cabeza antes de preguntar-Sí, asegúrate de darle las gracias. ¿Cuál es el estado de la tesorería real?

Después de la guerra, el tesoro se había agotado, agotado casi hasta la última parte de oro. Con las nuevas alianzas que se estaban haciendo, especialmente la que tenía con los Lannister, estaban recuperando lentamente el oro perdido.

-Con la forma en que van las cosas con los comerciantes y los mercaderes, Su Excelencia, la Corona podrá pagar todas las deudas con el Banco de Hierro. Sin embargo, la reina ha estado ayudando en la reconstrucción de diferentes estructuras en Westeros desde la tesorería real- Lord Baelish respondió, mirando un trozo de pergamino.

Muchos hablaron de las cosas que Livia había hecho sola la semana pasada. Ella ayudó a construir hospitales, ayudó a diferentes orfanatos y brindó asistencia a muchos que desean continuar con sus negocios, no solo en King's Landing sino en todas partes de Westeros.

Sí, él había estado ocupado pero ella también. Todos los días llegaban correspondencias, no solo para él, sino también para su esposa.

Con su clara sabiduría, estuvo casi tentado de preguntarle qué hacer con el levantamiento de Dornish pero, por supuesto, Jon ya estaba manejando las cosas. No hay necesidad de preocuparla por tal cosa.

Robert sonrió al pensar en ella, antes de que la seriedad volviera a apoderarse de él-Sí, ella me dijo eso. Cualquier cosa que ella pueda necesitar, dáselo. Cada parte del tesoro real debe ser accesible para ella, ¿entiendes?

-Sí, Su Gracia. Por supuesto- Lord Baelish respondió, inclinando la cabeza.

Antes de que ninguno de ellos pudiera decir algo, una serie de órdenes surgieron desde fuera de las cámaras. Todas las cabezas se volvieron hacia la puerta antes de que se abriera de golpe.

Livia entró en la habitación, el poder irradiaba solo de su forma y, aunque su rostro estaba claro por cualquier expresión, sabía que estaba enojada o al menos, molesta.

-Mis señores-Saludó mientras todos se inclinaban ante ella.

Robert se puso de pie, confundido-Livia, ¿qué estás ... te ha pasado algo?

𝑨𝒇𝒕𝒆𝒓𝒎𝒂𝒕𝒉 ||  𝑹𝒐𝒃𝒆𝒓𝒕 𝑩𝒂𝒓𝒂𝒕𝒉𝒆𝒐𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora