- Recuerdo haber escuchado el disparo de cañón.- los tres nos encontrábamos algo confusos.- ¿Y qué hacemos dentro de este esqueleto gigante?
- Es Eren el nos protegió... es todo lo que necesitamos saber por ahora.
- Chicos, ¿estáis bien?- los tres miramos sorprendidos a Eren.
- ¿Qué es es...?
- ¡Ni idea!- Eren me corto.- Pero se evaporara en cualquier momento, como cualquier cadáver de titan, debemos irnos.
- Pero...
- ¡Tenemos que ir al sótano de casa!- Eren rebusco en mi cuello y saco la cuerda con la llave que me dio mi padre.- Mi padre me dijo que todo tendría sentido una vez estuviese allí. Lo que sea en lo que me haya convertido, él tiene algo que ver...- le quite la llave y la volví a guardar.- Me iré de aquí.
- ¿A dónde y como?- preguntó Armin.
- Por ahora a donde sea, desde ahí pasaré el muro e iré al sótano.- se acercó la mano a la boca.- Solo necesito convertirme en un titán de nuevo...
- ¿En verdad puedes hacer eso?- Armin le preguntó algo alterado.
- No se como lo hago, pero creo que puedo... ese esqueleto vino a mi inconscientemente, yo solo quería protegeros del cañón, está vez iré con mucho más poder, con un titán de quince metros como el que use antes.
- Te esta sangrando la nariz.- Eren se limpio rápido la sangre.
- Luces enfermo y respiras con problemas. ¡es obvio que no estás del todo saludable!- intenté hacerle entrar en razón.
- No importa en que tan mala situación este, de cualquier forma tengo un par ideas.- rodé los ojos ya cansada.- Si dejan de intentar de protegerme... podrían escapar con sus vidas.
- ¿Entiendes que no podemos dejarte?- le dije molesta.
- Eren, voy contigo.- Mikasa me cogió de la mano tratando de tranquilizarme.- Si no puede seguirte, no necesitas preocuparte por ti.
- Deja de decir tonterías, no soy tu hermanito ni tu hijo.
- Eres un idiota Eren Jeager.- fui a pegarle en la cabeza pero Mikasa paro mi mano antes de que pudiese tocarlo.
- Dije que tenía dos ideas, ¿recuerdas?- las dos dirigimos nuestra mirada hacia Eren.- Usaré esto como último recurso, y quiero que lo sepan, lo que hagamos será decisión de Armin.
- ¿Disculpa?- el rubio salió de sus pensamientos.
- Este poder de titán puede ser la herramienta más útil en manos de ejército, esto sonara loco, pero si podéis convencer a los militares de que no los engañare entonces les confiare esto, y es lo que haremos.- termino de explicar su plan.- Si creéis que no podéis hacerlo, iré con el plan inicial. Tenéis quince segundos para decidir.- mire con el ceño fruncido a mis dos amigos.
Desconecte por un momento de la conversación, aún ni si quiera entiendo que es todo lo que le esta pasando a mi hermano y ahora también resulta que mi padre tiene que ver con lo que sea que le esté pasando, y ahora tenemos a los militares sobre nosotros, y ni si quiera se que hacer para poder ayudar mi hermano, no se ni si puedo hacerlo.
- Armin, confió en ti.- apoye mi mano en los hombros de mi amigo.
- ¡Me los ganaré o moriré en el intento!- el rubio exclamo mientras se levantaba.- ¡Tratad de veros lo más indefensos posible!
- Sacha, deja las cuchillas.- asentí en dirección a Mikasa y deje ambas en el suelo, espero que Armin logre convencerlos.
Cuando aquel hombre iba a dar la señal de que nos volviesen a disparar un hombre calvo, supongo que su superior, lo paró. El comandante Pixis dijo que quería hablar con nosotros. Una vez en los muros Eren le conto todo lo que sabía, incluyendo lo del sótano.
- Ya veo... si vas al sótano podrías encontrar respuestas a todas tus preguntas.
-Si...- Eren contesto cortante.- Seños, ¿usted me cree?
- Por ahora, tendré en mente todo por lo que no han podido proveer ninguna prueba positiva, creo que es el mejor camino. Dado que intentas conseguir material que permita aclarar todo este enredo, yo personalmente puedo ver por tu protección y la de tus amigos. Recluta Armin...
- ¡Señor!- el nombrado coloco su mano en el pecho.
- Antes creo que mencionaste algo sobre alguna manera de utilizar el "poder de titán" para poder recuperara la ciudad, ¿lo decías en serio o solo fue una suplica desesperada por tu vida?
- Eso fue... eso fue ambas, lo que quise decir es que Eren como titán puede llevar esa enorme roca hasta la puerta destruida para así bloquearla.- mire algo sorprendida a Armin, pero su plan si que tenía algo de sentido.- Solo una idea simple que se me ocurrió, quiero creer que el poder de Eren nos ayudará a desenredar la situación. Claro, que en verdad quiero evitar la ejecución, pero...
- Recluta Eren...- el comandante Pixis se acerco a nosotros.- ¿Puedes cerrar ese hoyo?
- ¡Lo hare señor, sin importar que!
- ¡Bien dicho, hablas como un verdadero hombre!- el comandante agarro a Eren de los brazos.- ¡Llamen a los oficiales, necesitamos hablar sobre estrategias!
- Esto es una locura... solo es un pobre pensamiento sobreestimado que se me ocurrió, él no puede tomarlo en serio...
- Armin, si un plan puede funcionar, es el tuyo.- me agache a la altura de Eren y cogí su cara entre mis manos observándolo por unos instantes.
- Estamos contra reloj.- me separe al escuchar al comandante Pixis en nuestras espaldas.- Muévanse, jóvenes soldados.
Iba junto a Mikasa acompañando a Eren para evitar que algún titán se interpusiera en su misión, nos paramos en el tejado dejando espacio a Eren para que pudiese transformarse. Como predije mi hermano se transformo mordiendo su dedo, una vez ya transformado se nos quedo mirando por unos segundos, justo antes de que estampase su muro justo contra nosotras. Ambas salimos disparadas, sentí mis huesos siendo golpeados, me agarre de uno de los salientes evitando seguir rodando por el tejado.
Vi a Mikasa intentando hacer que Eren pudiese tomar el control, mientras el resto daba la misión como fallida. Me queda impactada al ver como Eren se daba u puñetazo a sí mismo destrozando toda su cara.
¿Qué esta haciendo ese idiota? Su futuro y el de esta ciudad esta en sus manos y ni si quiera puede controlarse. Me levante y me enganche a Eren consiguiendo llegar hasta allí rápido, mientras note como el resto mataban a todos titanes que intentaban acercarse a Eren.
- Escúchame, no se que mierdas estás pensado, pero tienes que levantarte y tapar ese maldito agujero. Maldita sea Eren levántate de una vez, necesito que lo hagas.- me acosté en su cuello.- Por favor.
- ¡Sacha!- me gire al escuchar a Armin.- ¡Intenta sacar a Eren de ahí, el área detrás de la cabeza hasta la nuca, longitud un metro, ancho diez centímetros!
Me coloque de rodillas en la nuca de Eren sujeta por el equipo de maniobras, cogí una de mis cuchillas y la clave sin pensarlo mucho, al hacer esto Eren reacciono dando un rugido.
- ¡Eren escúchame!- ignore por completo lo que me decía Mikasa.- ¡Tienes que reaccionar, sal de ahí o todos moriremos! ¡No cedas ante un estúpido cuerpo de titán!- mis insistencias seguían sin hacer efecto.- ¡Tienes que vengar a mamá! ¡Prometiste matarlos a todos por lo que le hicieron a mamá! ¡Eres el único que puede hacer!- suspire cansada.- ¿Recuerdas todo lo que nos contaba Armin del mundo exterior? Sueñas desde pequeño en ir a ver el mundo exterior, pero si te quedas ahí parado no lo lograrás, ni yo tampoco, te recuerdo que prometiste llevarme a fuera contigo, pero si no sales de ahí nunca lo lograremos, tienes que conseguirlo, por mi, por Armin, por Mikasa...
Lo último que dije hizo reaccionar a mi hermano, volvió a hacer que su cara creciese, me agarre de su pelo para evitar caerme, me miró de reojo y yo asentí, no me movería de su lado. Agarro la gran roca sobre su cabeza y empezó a ir hasta la puerta rota. Me agarre aun con más fuerza cuando Eren se agacho para tapar la puerta.
Armin y Mikasa llegaron junto a mí y tratamos de sacar a Eren pero algo se había enganchado, se la cortamos al darnos cuenta de que tirar no serviría de nada, con un Eren moribundo en mis brazos vimos como un titán se acercaba peligrosamente a nosotros. Hasta que el titán cayó y un soldado estaba de pie en su nuca, llevaba una capa con el símbolo de las alas de la libertad.
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Defensora de la Humanidad (Jean x Lectora)
FanfictionAlexandra Jaeger, más conocida como Sacha. Está es simplemente la historia de como trata de sobrevivir en el mundo cruel en el que vive, tendrá que enfrentarse a cosas totalmente inesperadas. Tendrá que ir superándolas una a una, incluso cuando se...