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El barco Azumabito se había hundido, no había podido soportar la transformación de Falco.

- Y..., ¿cómo esta Armi...- se corrigió a si misma.- No, ¿cómo está Pieck?

- Armin fue capturado por lo titanes, su vida está en peligro.- le informó Mikasa.- El titán que se llevo a Armin debe estar en los huesos de la cola. Annie, ayúdanos.- pidió.

- A tus amigos de la infancia les gusta ser raptados, ¿no?- suspiro.- Claro, lo traeré de vuelta.

- ¿Qué hay de Pieck?- preguntó Reiner.- Ella está por el cráneo, tratamos de de volar la nuca, pero nos detuvo el titán martillo de guerra, envolvimos explosivos al rededor de su nuca, pero pudimos detonarlos.

- Ambos, haremos ambos...- dijo Levi.- Un grupo rescatará a Armin, los demás van por Eren y atacan la nuca al mismo tiempo... nos separaremos en dos equipos y lo haremos simultáneamente.

- No estamos en posición de preocuparnos de Eren...- hable.- Nunca lo hemos estado.

- Pero...- Mikasa protestó.

- ¿Pero qué?- preguntó Connie alterado.- ¡Habríamos muerto ahí a no ser por el milagro volador en el que estamos!

- Si... sin haber hecho nada.

- Jean...

Había tanto que quería decirle a ese idiota, pero... maldición.- dijo Levi.

- Yo igual, ¡no quiero renunciar a Eren!- exclamo Connie.- ¡Pero por mi culpa el capitán ya no puede pelear! Es más, estamos contra el titán fundador, ¿realmente crees que lo tenemos más fácil?

- Mikasa...- dije entre dientes.- Necesitamos matar a Eren...

Baje la mirada para no ver la cara de horror de la azabache.

- Tú solo céntrate en salvar a Armin, no pienses en nada más.- le dije.

- Vale...

- Cuando la cabeza de Eren voló...- mire a Gabi.- Le disparé y corté la cabeza de Eren con un riffle anti-titán, justo antes de que tocase al señor Zeke. Cuando lo hice, algo salió de la espina de Eren, parecía un ciempiés brillante o algo así, conectado a la cabeza de Eren.

- ¿Qué? grotesco.

- Ese es el titán fundador.- continuó la niña.- No, si esa es la verdadera naturaleza del poder de lo titanes... podríamos verla de nuevo, si lo decapitamos.

- Mikasa, Annie y Connie recuperaréis Armin.- les ordene.- Reiner te quedarás distrayendo a lo titanes, Jean necesito que nos cubramos las espaldas hasta que consigamos llegar al detonador y activarlo.

- Tengo la pierna mal pero...- Levi comenzó a hablar.

- Te quedarás con Falco y Gabi, vendréis a ayudarnos cuando sea el momento.- dije seria.

- No, yo iré junto a Reiner y ganaré tiempo para vosotros.- replicó.

- Te estoy dando una orden como tu comandante, no hay objeciones que valgan, te quedarás aquí, no estás en condiciones de luchar.- respondí firme.- Eso no implica que no puedas cumplir la última orden que le comandante Erwin te dio.

Volamos de nuevo hacia el titán fundador, enseguida las flechas de los titanes martillo vinieron como proyectiles hacia nosotros.

- ¡Vamos!- di la señal para que Reiner y Jean saltasen.

- ¡Sacha!- escuché a Mikasa.

- ¡Por favor, no muráis!- exclamó Connie.

Junto con Jean me encaminé hacia la nuca del gran titán fundador. Antes de que pudiésemos llegar nuevos titanes aparecieron.

- ¿Refuerzos?- le escuché susurrar.

Comenzamos a luchar contra ellos, pero eran demasiados, Pieck salió de su titán y volvió a transformarse para ayudarnos.

- ¡Pieck aléjate!- gritó Jean al verla salir disparada de la nuca de su titán.

- Jean... si crees que soy un titán que solo sirve para trabajos sobrantes y no para pelear, estás muy equivocado, con la resistencia del titán carreta mientras no me saquen, puedo pelear hasta que ganemos.

- ¡Debemos avanzar!- le grite a Jean.

Pero de nuevo un titán nos intercepto, eran demasiado, a este paso no íbamos a conseguir llegar nunca.

Tenía ganas de llorar, estaba más que claro que este lugar sería nuestra tumba, por más que mato titanes no dejan de aparecer otros nuevos. Peick, Reiner, todos estábamos en nuestro límite.

En un descuido un titán me agarro, ni siquiera luche para salir de ahí, solo esperaba mi muerte, no tenía las fuerzas para seguir peleando. Cerré los ojos intentando buscar paz para morir, pero aún así no podía evitar llorar al pensar en todo lo que dejaría atrás pero no se si eso es lo suficientemente fuerte para hacer que siga luchando por estar viva.

Entre la desesperación vino a mi mente una imagen suya, de Jean, él y el bebé que llevo dentro son el ancla que hacen que siga luchando por estar aquí. Porque lo único que quiero es poder vivir tranquilamente con ellos y el resto, quiero dejar de luchar.

Abrí los ojos desesperada con la intención de salir del agarre del titán, pero era imposible mover mis brazos, quizás me he decidido a seguir luchando demasiado tarde.

- ¿Qué?- el titán me soltó de golpe, utilice el equipo de maniobras para escapar de ahí. Otro titán lo había atacado, yo lo había visto antes... en los recuerdos.- ¡Papá!

Ellos nos estaban ayudando, cogí dos cuchillas nuevas y me tire de nuevo hacia los titanes.

- ¡Jean!- llamé al chico.- ¡Ve ahora!- él estaba más cerca de la cabeza de Eren que yo.

Escuché la explosión, la nuca de Eren se dividió en dos, pero ese gusano del que habló Gabi salió de ella.

- ¡Sacha!- Connie tiró de mi camisa subiéndome a Falco.- ¡Armin va a explotar todo esto!

Algo desorientada me agarre a la red y me deslicé despacio hacia Levi.

- Lo conseguiste.- apoyé mi mano en su espalda, sabia como de importante era para él lograrlo.

Fuimos a por Jean y Pieck, dejaríamos a Reiner, no podíamos ir a por él ahora que estaba reteniendo a ese gusano, de todas formas el titán acorazado debería aguantar la explosión del colosal.

Observe desde la altura la explosión, no puedo creer que todo esto haya acabado ya...

- Adiós Eren...- susurre.

Me sentía mal, él había luchado tanto por su libertad... pero no hizo lo correcto, acabar con la libertad de otros para conseguir la nuestra no está bien. Pero al fin y al cabo lo estaba haciendo por nosotros...

Podríamos haber hecho las cosas de otra forma, y no hubiésemos tenido que acabar matándolo, pero bueno, al fin y al cabo el fue libre de escoger su camino. Eres un idiota Eren. 

Defensora de la Humanidad (Jean x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora