Defensora de la Humanidad (Jean x Lectora)

25

¡Recuperad el muro María! ¡El futuro de la humanidad está en vuestras manos! - eran algunos de los gritos que se escuchaban, estábamos a punto de partir hacia la misión de recuperar el muro María.

- ¡Comienza la operación final para recuperar el muro María!- el grito del comandante dio paso a que todos avanzásemos.

Íbamos atravesando un bosque a pie, pero con nuestros caballos.

- ¿Crees que lo que sea que haya en el sótano nos ayudara a comprender todo? - mire de reojo a Armin.

- Eso espero, si es señor Jeager sabía algo, debe estar allí.

- Entonces, él iba a mostrárnoslo antes del ataque, cuando se fue de viaje nos prometió que a su vuelta nos enseñaría lo que guardaba allí.

- ¡Titán a la izquierda!- todos prestamos atención hacía aquel lado.

- Esta bien... parece que esta adormecido, este no parece ser de esa clase de titanes que se mueven incluso de noche.

- Que mal, dejémoslo aquí.- pase de largo aún sin quitarle la mirada de encima, me daba escalofríos.

- ¿Tienes frío?- hasta que Jean no me pregunto no me di cuenta de que estaba temblando, no se si por frío o por el miedo, estar de noche en un bosque donde podríamos encontrarnos un titán en cualquier momento o peor, a Reiner o Bertholdt, no era mi plan perfecto.- Estas tiritando.

- Tranquilo, estoy bien.- le dedique una sonrisa.- Solo es este lugar, y pensar en todo lo que se avecina.

- Este sitio... yo lo reconozco.- nos paramos al escuchar a Mikasa.- Solía venir aquí a recoger leña.

- ¡Llegamos al pie de la montaña, puedo ver el viejo camino!

- Ya casi hemos llegado.- mire a Eren.

- Puedo escuchar el río.- preste atención ante lo dicho por Mikasa, era verdad, se podía escuchar el río.

- Estamos de vuelta...

- Por primera vez, desde que escapamos aquel día.- complete la frase de Armin, estábamos de vuelta en nuestra ciudad, a un paso de saber toda la verdad.

Dejamos a los caballos y subimos a lo alto del muro, pude observar a mis pies todo Shiganshina, todas las casas destrozadas, todo vacío.

- ¡No te detengas, sigue avanzando hasta la puerta exterior!- reaccione ante lo dicho por el capitán y continué mi camino.

Mire hacia el suelo mientras sobrevolaba el lugar, mi casa no estaba muy lejos de aquí, una imagen de todos comiendo en la cocina vino a mi mente, los cinco, juntos.

Eren se transformo en titán y según el plan tapo el agujero en la muralla, raro, pero parecía que todo había salido según lo esperado.

- ¿Cómo estás?- me acerque a Eren y Mikasa.

- Bien, mi equipo de maniobras está bien, pero he perdido la capa al salir de ahí.- quite la capa que me cubría y se la fui a pasar por los hombros.

- No.- Mikasa me paro y le dio la suya.- Vuestro parecido podría confundirles a larga distancia, es mejor que te la dejes puesta.

Mientras íbamos hacia la puerta interior, se escuchó el disparo de una véngala, la señal de alto, por ordenes de Hange subimos a lo alto de los muros a la espera de nuevas ordenes.

- ¿Qué están haciendo?- pregunte al ver al resto de soldados inspeccionar el muro.

- ¿En serio nos detendremos aquí?- preguntó Connie.

- Si, ¿cúal ha sido el motivo de esa inoportuna orden?- mire a Jean y luego volví mi mirada la frente donde ahora estaba Armin.

- Armin... ¿has encontrado algo?- pregunte al ver su mirada.

- ¡Aquí hay un punto hueco!- el grito más el sonido de una véngala llamo nuestra atención, un cacho de la pared se abrió dejando salir a Reiner, quien atravesó con una de las cuchillas a quien los había descubierto. Ahora Reiner ya fuera del todo se encontraba cara a cara con Armin.

Baje por el muro lo más rápido que pude e intente cortar su cuello, pero no conseguí atravesarlo del todo, mi otra cuchilla la calve en su abdomen. No aparte la mirada de sus ojos y saque las cuchillas del tirón.

- Mierda...- masculle al verlo caer al suelo y convertirse en titán. Pero un estruendo llamo nuestra atención, un titán peludo seguido de muchos más de los comunes comenzó a tirarnos piedras.

- Ese titán que esta a cuatro patas probablemente tenga también la capacidad de pensar.- mire atentamente al titán al que se refería el comandante.

- Y aún no sabemos donde esta Bertholdt.- observe el panorama, nos tenían completamente acorralados, ese mono gigante junto al resto de titanes por un lado y por el otro Reiner.

- ¡La unidad de Dirk y la unidad de Malene, diríjanse a la puerta central, donde esta la unidad de Klaas y proteged los caballos a toda costa!- el comandante rompió su silencio.- ¡El escuadrón de Levi y Hange reducid al titán colosal! ¡El futuro de la humanidad está en juego aquí! ¡Este es el momento para entregar nuestros corazones a la humanidad!

- Entonces él quiere usar a Eren como señuelo para proteger a los caballos?- pregunto Hange.

- Si, esas son las ordenes del comandante.- después de que Armin nos contase el plan, repasamos cada opción de este con Hangi, si todo salía como el comandante había pensado, deberíamos poder acabar con esto aquí.- Hay otra cosa importante, el titán colosal aún se encuentra escondido en alguna parte, la última vez que teníamos acorralado a Reiner, se llevaron a Eren porque Bertholdt ataco por sorpresa.

- Para evitarlo, hay que luchar fuera de los muros.- dije y Armin me dio la razón asintiendo.

Nos preparamos con las nuevas armas desarrolladas con las que podríamos traspasar la armadura del titán acorazado.

No lo entienden... esta vez ellos están en nuestra casa, en el lugar donde tuve y donde perdí todo, el mismo lugar que será su tumba.

La pelea entre Reiner y Eren era como una montaña rusa, a veces parecía que uno iba en cabeza pero luego el otro remontaba.

- ¡Ahora!- escuché la señal de Hange, cuando ella junto a Mikasa lograron cegarle, el resto lo atacamos por la espalda, directo en la nuca.

- ¡Ha funcionado! ¡Hemos abierto la armadura en su nuca!

Nos lanzamos al segundo ataque, si todo salía bien, Reiner no pasaría de aquí.